Por primera ocasión Sancti Spíritus fue sede principal de la Jornada cubana contra la homofobia y la transfobia. La ciudad del Yayabo, distinguida por su apego a lo tradicional y su sello guajiro, abrió sus puertas y ventanas a la diversidad y acogió la decimosexta edición del suceso que refrenda derechos, equidad y una construcción social más justa.
Entre el 15 y el 17 de mayo, la bandera arcoíris, símbolo de la comunidad LGBTIQ+, engalanó el centro histórico de la urbe y acompañó los espacios teóricos, las presentaciones de publicaciones literarias, la feria comunitaria, la gala cultural y la tradicional conga características del cierre de estas jornadas.
La singularidad de sesionar tras la aprobación y entrada en vigor del nuevo Código de las Familias distinguió las actividades en predios espirituanos. La campaña Por todas las familias el amor es ley proyectó la jornada hacia el respeto a la pluralidad familiar, la educación integral de la sexualidad y a afianzar la cultura jurídica relacionada a aspectos vinculados al derecho familiar contemplados en la legislación.
“Vivimos en un país con mejores herramientas para defendernos de situaciones que violen nuestros derechos y esa una de las tantas motivaciones por las que celebramos la Jornada cubana contra la homofobia y la trasnsfobia”, expresó en Sancti Spíritus la doctora en Ciencias Sociológicas, Mariela Castro Espín, directora del Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex).
