Dedicada al aniversario 45 de dicha institución, esta esperada fiesta artesanal desde 2004 agasaja a las madres cubanas con soluciones creativas y autóctonas para satisfacer necesidades utilitarias y espirituales de las familias cubanas, donde el rol materno ha demostrado su capacidad de resiliencia en la respuesta a los efectos prolongados de la pandemia.
Según una nota de prensa institucional, a tono con las actualizaciones económicas del país, el espacio ferial suma disímiles ofertas de las formas de gestión no estatal, como parte de la amplia cartera de productos manufacturados que brinda, con auténtica diferencia, sentido identitario, alto valor estético y probada calidad. Las propuestas artesanales comprenden las manifestaciones de textil, mobiliario, calzado, bisutería, piel, orfebrería y cerámica, entre otras.
Hasta el momento, la edición capitalina de la feria cuenta con 145 stands de expositores nacionales; de ellos, 114 pertenecen a creadores, 4 institucionales y 27 de nuevos actores económicos, entre trabajadores por cuenta propia, mipymes y proyectos de desarrollo local. Igualmente, figura la participación internacional, representada por 19 expositores procedentes de Colombia, Panamá, Ecuador, Sudáfrica, México, España, India y Perú.
La cita tiene una trascendencia nacional con sedes en todas las provincias de la Isla, lo cual propicia la interacción entre creadores y público, además del disfrute de opciones culturales, como desfiles de moda, exposiciones de arte, presentaciones musicales y danzarias.
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