Elba Rosa Pérez Montoya, ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), consideró al 2023 como un año de retos y esperanzas, al resumir hoy, el acto nacional por el Día de la Ciencia Cubana, sede que recayó en la provincia de Sancti Spíritus.
Manifestó que en el actual año habrá que afrontar dificultades, pero con el mismo espíritu desplegado en el anterior se podrán obtener triunfos en la labor científica e investigativa en el país, puesto que prima la voluntad política para ello.
La también integrante del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) destacó el esfuerzo desplegado por la comunidad científica cubana en medio de difíciles condiciones, recrudecidas por el férreo bloqueo económico, financiero y comercial del gobierno de Estados Unidos contra el archipiélago.
Particular énfasis puso Pérez Montoya en la labor cohesionada entre las máximas autoridades políticas y del Gobierno y los científicos en el enfrentamiento a la pandemia de la COVID-19, lo que facilitó, dijo, el diseño de cinco vacunas contra esa enfermedad, al igual que la fabricación de ventiladores pulmonares que le permiten al país contar con mayor capacidad de respuesta ante una situación crítica.
En sus palabras, resaltó la visión estratégica del Comandante en Jefe Fidel Castro cuando expresó que el “futuro de nuestra Patria tiene que ser necesariamente un futuro de hombres de ciencia…” en su discurso pronunciado el 15 de enero de 1960, en ocasión del acto efectuado por la Sociedad Espeleológica de Cuba.
Varias instituciones y personalidades con relevantes resultados en la actividad científica y la investigación fueron agasajadas en la ceremonia, a la que también asistió Marta Ayala Ávila, miembro del Buró Político del PCC y directora general del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB).
Igualmente se encontraban presentes Jorge Luis Broche Lorenzo, integrante del Secretariado del Comité Central y jefe del departamento de Atención al Sector Social, e Inés María Chapman Waugh, viceprimera ministra de la República de Cuba, entre otros dirigentes de organizaciones políticas y de masas y del Gobierno a nivel nacional y provincial.
Durante la ceremonia Sancti Spíritus recibió la bandera y el certificado acreditativos de la sede por la mencionada celebración, en la que se tuvieron en cuenta sus resultados científicos en 2022 aplicados a la producción de alimentos, en el uso de la energía renovable, a la estrategia de desarrollo local y en el enfrentamiento al cambio climático.
Leonel Díaz Camero, delegado del CITMA en esta región, mencionó algunos de los logros del territorio en el pasado año, entre los que se encuentra la generalización del cultivo de maíz híbrido transgénico, cuyos rendimientos oscilan entre cinco y seis toneladas por hectárea, además del incremento de variedades de arroz, con semillas certificadas de alta calidad por su adaptación al clima y ganancias agrícolas.
Igualmente, reseñó Díaz Camero la introducción de soya transgénica con rendimientos superiores al promedio de los obtenidos a nivel mundial.
A todo lo anterior añadió resultados del CIGB en Sancti Spíritus, centro que entre sus éxitos mantiene la entrega a otras instituciones científicas de enzimas para las pruebas de diagnóstico mediante PCR (siglas en inglés de Reacción en Cadena de la Polimerasa) en tiempo real para detectar el virus del SARS-CoV-2.
Con la primera entrega de las aludidas enzimas, afirmó el delegado del CITMA, Cuba pudo sustituir importaciones por valor de unos 125 mil pesos en moneda libremente convertible.
En el acto fueron reconocidas las demás provincias que tuvieron loables resultados en el quehacer científico el pasado año, mérito que recayó en Pinar del Río, Villa Clara y Granma.
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