La Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM), la cual agrupa a más de 70 organizaciones sindicales brasileñas, junto con otras muchas en el mundo, expresó su contundente repudio a los atentados ocurridos en ese país sudamericano contra el gobierno legítimo del presidente electo Luis Inácio Lula da Silva y la democracia.
En una nota pública facilitada a Trabajadores, la directiva de esa federación afirma que desde ayer domingo ha recibido una numerosa cantidad de expresiones de solidaridad con los trabajadores y las instituciones democráticas de Brasil y de completo rechazo a las manifestaciones para materializar un golpe de estado.
“Apenas ocho días después de la toma de posición del presidente Lula e iniciada la gestión de las organizaciones del nuevo gobierno, ocurre este acto que calificamos de terrorismo contra la democracia, la legalidad y el derecho del pueblo que clama respeto a sus decisiones”, añade la nota.
“Por lo anterior (…), activamos todas las alarmas de nuestras estructuras globales, en defensa de la democracia brasileña y llamamos a la comunidad internacional a que registre esos atentados como hechos condenables plenamente y exigimos que se investigue hasta las últimas consecuencias su origen, se determinen los responsables y sean sentenciados con todo el rigor de las leyes”, agrega.
Por último señala que “deseamos la paz y concordia (…) y estamos seguros de que se adoptarán todas las medidas para hacer respetar la democracia, la convivencia y la armonía en aras del deseo del pueblo y los trabajadores brasileños”.