El Cuerpo de Guardabosques de Cuba (CGC) anunció en La Habana los preparativos de su Campaña nacional de protección contra incendios forestales, que comienza este mismo mes y concluirá en mayo próximo con el inicio del período lluvioso.
La dirección de la institución impartió instrucciones sobre el particular por videoconferencia con la participación de los jefes de la especialidad y representantes de los órganos y jefaturas provinciales del Ministerio del Interior.
Sobre la necesidad de tener en cuenta el impacto que pueden provocar en el país los fenómenos del cambio climático, advirtió el Coronel Manuel Lama Gómez, jefe del CGC, quien ofreció detalles acerca de la nueva cruzada, en particular en torno a sus peligros y principales riesgos identificados.
Hizo hincapié en los aseguramientos logísticos del combate contra las llamas, incluido el asesoramiento del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, el empleo de equipos existente en los Centros de Gestión de Riesgo y los Puntos de Alerta Temprana del Gobierno.
Mencionó el mantenimiento a las herramientas manuales y dispositivos, la defectación de la técnica especial, la preparación de la Guardia Operativa, y el establecimiento de coordinaciones con la Cruz Roja, para la preparación de las brigadas profesionales en primeros auxilios de su personal.
Citó también la cooperación con los administradores y tenentes del patrimonio forestal, al igual que otros colindantes para el uso de fuerzas y medios en las acciones de prevención anti siniestros.
Reiteró que el persistente y dañino bloqueo económico, financiero y comercial del gobierno de Estados Unidos limita el enfrentamiento a tales fenómenos, por carencia de recursos y equipos, aunque destacó el rol de sus fuerzas y de las empresas agroforestales.
Sin embargo, llamó la atención de que es imprescindible incrementar la percepción del peligro de incendios forestales por los diversos públicos y la población en general, a fin de que no ocasionen negligencias, principalmente la práctica de quemas sin adoptar las medidas de seguridad correspondientes.
De acuerdo con Lama Gómez, Licenciado y Master en Ciencias Sociales, es imprescindible prestar especial atención a las provincias de Pinar del Río y Artemisa porque el mayor peligro se concentrará en la región occidental, tras cantidad de material combustible que dejó el huracán Ian en septiembre pasado.
Según estimados oficiales y por índices de frecuencia, se prevé que estallen de 320 a 445 incendios forestales, que pudieran dañar de cuatro mil 300 a seis mil hectáreas en el período de enero a mayo entrante.
En campañas anteriores, la inmensa mayoría de ellos ocurrieron por negligencias, sobre todo por cazadores y pescadores furtivos, y en cuanto a la última, las pérdidas económicas sobrepasaron los 22 millones de pesos, aunque sus efectivos mantuvieron un control mínimo de las afectaciones en comparación con su antecesora.
Una de sus evidencias consistió en que el 83% reportado pudo ser controlado antes de las cinco hectáreas y en todos los casos se determinó la causa de su origen.
Cuba cuenta con un Sistema Nacional de Protección Contra Incendios Forestales, que posee una Estrategia y Programa Nacional de Gestión y Manejo del Fuego en los bosques para el período 2018-2025, algo poco común en el mundo.
(Tomado de ACN)
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