Los directivos, técnicos y trabajadores del sector hidráulico en el país rinden homenaje póstumo al Comandante del Ejército Rebelde Faustino Pérez, revolucionario, político y médico cubano, integrante del Movimiento 26 de Julio, quien desempeñó diversos cargos en el gobierno, y falleció el 24 de diciembre de 1992, hace hoy 30 años.
Entre sus responsabilidades asumió la de presidente del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) de 1962 al 1969 y fue, junto al Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, impulsor de la voluntad que posibilitó desarrollar, de forma acelerada, un amplio programa de construcciones de presas, canales, estaciones de bombeo…, para evitar fundamentalmente, las inundaciones cuando ocurrieran fuertes precipitaciones por causas meteorológicas diversas y que ese valioso recurso natural se fuera al mar.
El acto central, en el que estuvieron presentes Inés María Chapman Waugh, viceprimera ministra de la República de Cuba; Antonio Rodríguez Rodríguez, presidente del INRH; familiares, amigos de Faustino y combatientes, se efectuó en el Panteón de los Combatientes, en el capitalino Cementerio de Colón.
Yamila Reverón, directora de Cuadros de ese Institutito, expresó en una síntesis de la vida y obra del Comandante del Ejército Rebelde sus notables aportes al proceso revolucionario y la actitud ejemplar y comprometida que siempre mantuvo.
La Dirección de Comunicación Institucional del INRH difundió un texto con motivo del aniversario. En él señalan que “la historia crea hombres de temple y acción, pero hay héroes que se forjan en la trinchera de la vida, en el cursar de las experiencias y en el legado de las victorias”.
Faustino Pérez Hernández, fruto de la tierra espirituana, también estuvo ligado a la historia matancera, con páginas de honestidad y entrega”, agrega.
“La simiente del revolucionario se halla en el conocimiento del pensamiento y la obra martiana, inculcada tempranamente por sus primeros maestros, junto con el sentido de honradez, justicia y honor vivido en el ámbito familiar”, apunta y acota que, como bien expresara el Comandante en Jefe Fidel Castro, Faustino fue la conducta de la Revolución.
Combatiente destacado
A principios de mayo de 1958, subió por vez primera a la Sierra Maestra. En la reunión de Altos de Mompié se hizo un análisis de las causas del fracaso de la Huelga del 9 de Abril y se decidió que toda la dirección del Movimiento 26 de Julio (M─26─7), de la cual él formaba parte, quedara subordinada a la Comandancia en la montaña. Fue sustituido como Coordinador Provincial en La Habana y pasó a integrar el ejecutivo de cinco miembros, cuyo Secretario General era Fidel Castro.
Faustino Pérez se refirió a ese encuentro como una discusión ejemplar entre revolucionarios. Luego bajó al llano por última vez para arreglar los asuntos concernientes a la reestructuración del M─26─7.
Regresó la Sierra cuando comenzada la ofensiva militar contra el Ejército Rebelde, el 19 de julio, ordenada por el gobierno del entonces presidente Fulgencio Batista Zaldívar. Entró por el campamento del Comandante Ernesto Guevara, en La Mesa, y poco después se reunió con Fidel en La Plata. Permaneció en la Comandancia General durante los meses de julio y agosto. Participó en los combates de Santo Domingo, El Jigüe, Arroyotes y Las Mercedes.
Al ser liberada una buena parte de la Sierra Maestra le fue encomendada la administración civil del Territorio Libre.
Al triunfar la Revolución el 1ro de enero de 1959 estuvo junto al Comandante en Jefe en las horas decisivas en las que a través de Radio Rebelde se aniquiló el intento de torpedear la victoria mediante un golpe de Estado. Tres días después, cuando en la Universidad de Oriente se constituyó el primer gabinete revolucionario, se le designó como Ministro de Recuperación de Bienes Malversados.
Al cesar en el cargo fue nombrado Jefe de Sanidad Militar. Participó como jefe en la lucha contra las bandas de alzados en el Escambray (zona central del país) y combatió en Playa Girón contra la invasión mercenaria, en abril de 1961. Después de desempeñarse como Presidente del INRH fue nombrado embajador en la República de Bulgaria y jefe de la Oficina de Atención a los Órganos Locales del Poder Popular.
En los años 70 ocupó la responsabilidad de Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en la región de Sancti Spíritus, donde asumió tareas trascendentales para ese territorio como la construcción de la presa Zaza y el desarrollo del plan arrocero Sur del Jíbaro.
Por decisión propia estuvo junto con los pobladores de la Ciénaga de Zapata, en la responsabilidad de director de la Empresa Agroforestal Victoria de Girón. En esa región del centro-sur de la Isla grande del archipiélago cubano propició el desarrollo social y económico y la preservación del medio ambiente. Hasta su muerte, el 24 de diciembre de 1992, integró el Comité Central del PCC. (Fuente histórica: Ecured).
