El General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución cubana, presidió este sábado el acto político y ceremonia militar en ocasión del aniversario 60 de la fundación de la Contrainteligencia Militar, constituida el 7 de noviembre de 1962, y cuya historia es, por muchas razones, la historia de la Revolución misma.
A los jefes, oficiales, suboficiales, cadetes, sargentos, soldados y trabajadores civiles de la Contrainteligencia Militar transmitió el General de Ejército sus más calurosas felicitaciones, a través de una carta a la cual dio lectura en la conmemoración el general de división Víctor Rojo Ramos, jefe de la Dirección Política de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
En la misiva, Raúl manifestó su certeza de que los miembros de este prestigioso órgano «continuarán preservando, con la profesionalidad y honradez que los caracteriza, la seguridad de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y de la obra de la Revolución».
De retos, compromisos, historia, integridad y reconocimientos se habló en el homenaje, realizado en el polígono de la Escuela Militar Superior «Comandante Arides Estévez Sánchez», donde estaban presentes los miembros del Buró Político, general de cuerpo de ejército Álvaro López Miera y general de división Lázaro Álvarez Casas, ministros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Interior, respectivamente. Junto a ellos asistió también una representación de jefes principales de las dos instituciones armadas, así como de fundadores y jubilados de la Contrainteligencia Militar.
Tras el parte del Jefe de las tropas y la revista a las mismas, con el correspondiente saludo del oficial revistador, hizo uso de la palabra la capitán Roxana Díaz Prieto, integrante de la Contrainteligencia Militar, quien en nombre de las nuevas generaciones de oficiales reconoció que, aun cuando mucho se ha trabajado, los desafíos que están por delante son todavía mayores.
«Para los revolucionarios no hay descanso, tenemos que estar unidos y trabajar por continuar consolidando las conquistas alcanzadas», enfatizó.
En sus palabras, la joven oficial ratificó al «Partido, al General de Ejército Raúl Castro Ruz y al pueblo de Cuba, que el relevo está garantizado, porque los combatientes de la Contrainteligencia Militar no defraudarán jamás la confianza que la dirección de la Revolución ha depositado en nosotros».
Esta mañana de homenaje fue escenario propicio, además, para que el General de Ejército recibiera, de manos del general de división José Miguel Gómez del Vallín, jefe de la Jefatura de la Contrainteligencia Militar, un diploma con el cual se reconoce su condición de jefe fundador de este órgano de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y su labor en estas seis décadas como educador por excelencia de generaciones de oficiales.
A su vez, el líder de la Revolución cubana hizo entrega de un reconocimiento a la Contrainteligencia Militar, cuyos integrantes se distinguen por la consagración, la responsabilidad y la modestia en el cumplimiento de las tareas, quienes durante los últimos 60 años han protegido a la institución armada contra los planes del enemigo interno y externo.
«La fecha que celebramos es un día glorioso para aquellos que nos formamos en este órgano y un privilegio para los que tenemos el placer de conmemorar este 60 aniversario», manifestó el Jefe de la Jefatura de la Contrainteligencia Militar, al pronunciar las palabras centrales del acto político y ceremonia militar que culminó con el desfile de las tropas.
Luego de hacer un breve recorrido por varios momentos de la lucha revolucionaria, que se convirtieron con el devenir de los años en las raíces fundacionales de la Contrainteligencia Militar, el general de división Gómez del Vallín recordó de manera especial el papel desempeñado por el Comandante en Jefe y el General de Ejército, en el transcurso de estas décadas.
En su intervención también reconoció a los fundadores, héroes y mártires, de quienes heredamos, dijo, su sacrificio, valentía y actitud revolucionaria; a los colaboradores «que han trabajado junto a nosotros»; y particularmente a los jóvenes, que en cada época han impregnado su espíritu de trabajo y cimentado la Revolución con el sudor del sacrificio.
Para los combatientes de la Contrainteligencia Militar, aseveró, no existe otra alternativa que el trabajo sistemático e inteligente, con un empleo racional y eficiente de las fuerzas y medios de que disponemos, teniendo como base la convicción más profunda de la importancia de la labor que realizamos.
Este aniversario -subrayó- debe constituir un «momento de necesaria reflexión y análisis crítico de todo lo que hacemos, donde primen la objetividad y un elevado rigor profesional, desprovisto de criterios triunfalistas que nos dificulten apreciar la realidad con toda su crudeza y matices».
En medio de tantos retos que definen el actual escenario del país y constituyen un enorme desafío para mujeres y hombres que integran las filas de este órgano militar, el Jefe de la Jefatura de la Contrainteligencia Militar consideró un honor que el General de Ejército los guíe, oriente y exija de todos que «cada día seamos más profesionales, disciplinados, eficientes y mejores combatientes para cumplir las complejas tareas y misiones que tenemos por delante».