El recordista mundial y Guinness del dominio del balón, Erick Hernández, implantó hoy una nueva marca, tras golpear la esférica con la cabeza durante una hora y nueve minutos, desde la posición de sentado y con lastre de kilogramo y medio en cada uno de sus tobillos.
En el lobby del hotel Copacabana, Hernández pulverizó sus cotas anteriores de una hora y dos minutos, en Varadero, y de una hora y cinco minutos, durante la pandemia.
«Me sentí bastante cómodo y comprometido en este record, lo que provocó que me agotara un poco», dijo en primera instancia el atleta, que dedicó la consecución de la nueva marca al pueblo pinareño.
«Dediqué menos tiempo a la carrera y el trabajo en el gimnasio llevó el mayor peso de la preparación, que se alargó bastante, pues cuando tenía pensado realizarlo en Varadero vino la tragedia de la base de supertanqueros y luego el huracán.
«El clima me golpeó un poco porque casualmente se rompió el aire acondicionado y entonces sudé un poco más de la cuenta, pero todas las demás condiciones eran idóneas», expresó.
El plusmarquista contó con el apoyo de un gran número de personas, que se unieron al equipo nacional de fútbol sub 17 y las máximas autoridades del más universal de los deportes en la Isla.
Asimismo, Hernández adelantó que el próximo 19 de noviembre intentará realizar un nuevo desafío, aunque no especificó en qué modalidad.