Uno de los “gallos” de afiladas espuelas y talento como innovador es Noelvis Valenzuela Dulzaide, quien está convencido de que las gallinas ponedoras de alto rendimiento en esta provincia no son la excepción en el sector de la avicultura cubana, en relación con el alto nivel de estrés que enfrentan hoy para lograr la formación del huevo dentro de su estructura anatómica.
Considera el destacado obrero agropecuario que no se trata de deficiencias en el manejo de las aves, sino de un comportamiento nutricional inusual, debido al insuficiente suministro de piensos y otras carencias que disminuyen la acostumbrada cantidad de posturas en la canasta familiar normada.
Afirma, no obstante, que el colectivo de la Empresa Avícola avileña no renuncia a la fortaleza de ser de los pilares en el país en el indicador huevo por ave, uno de los medidores de la eficiencia. Así cumplen sus trabajadores el plan de ventas al Estado y los envíos a otras provincias en lo que va de año, de acuerdo con el balance nacional de distribución de alimentos.
Tales triunfos cuentan con los aportes de este emprendedor miembro de la Asociación Nacional de Innovadores y Racionalizadores (Anir) que por estos días andan de cumpleaños.
“Mis primeras inventivas —ejemplifica— solucionaron roturas de palas y carretillas para trasladar el alimento animal en las unidades productivas.
“Una de las más importantes fue la fabricación de rejillas metálicas para los comederos tubulares en la granja de gallinas, conocidas como las reproductoras pesadas, con vistas a que los gallos no consuman el alimento de las hembras porque eso afecta la producción de huevos destinados a la incubación en una planta que garantiza los pollitos para la ceba, uno de los programas de desarrollo de nuestra entidad”.
La avicultura alternativa, experiencia que se extiende a criadores de la población, cuenta también con las contribuciones de Valenzuela Dulzaide: “Confeccioné una peladora de huevos de codorniz y jaulas para la crianza de este tipo de aves; estas últimas tienen cada una un valor de 4.37 euros en el mercado mundial…”.
Tales contribuciones en la disminución de importaciones tiene otro logro no menos significativo: “Con recortería de alambre fabriqué las grapas que utilizamos en las reparaciones de las jaulas de gallinas ponedoras, con cuyo trabajo garantizamos la continuidad de la producción y le hemos ahorrado buena cantidad de dinero a la empresa”.
Noelvis es uno de los más de 290 mil miembros de la Anir en el país. “La reciente exposición Soluciones CUBA, por citar un ejemplo, nos demostró que podemos lograr soluciones en el puesto de trabajo para que la recuperación económica siga contando, desde la innovación, con el aporte de los trabajadores”.