Carmen, el célebre personaje creado por el francés Prosper Mérimée y llevado magistralmente a la ópera por su compatriota Georges Bizet, es desde el pasado siglo una presencia permanente en la danza. El cubano Alberto Alonso coreografió una de los más célebres ballets a partir de esta historia, en el que brilló el genio inmortal de Alicia Alonso. Pero el público cubano ha podido apreciar numerosas versiones, de disímiles implicaciones estilísticas y conceptuales.
La Compañía Nacional de Danza de España (CND) presentará en el Festival Internacional de Ballet de La Habana “Alicia Alonso” la propuesta del coreógrafo sueco Johan Inger, una creación que ha sido acreditada por la crítica y el público en varios escenarios de Europa y América.
La sala Avellaneda del Teatro Nacional de Cuba acogerá tres funciones (11, 12 y 13 de noviembre), en la que será una de las principales propuestas internacionales de la cita que comienza el próximo 20 de octubre.
En la página oficial de la CND se puede leer que cuando Johan Inger recibió el encargo de montar una nueva versión de Carmen —siendo él sueco y Carmen una obra con un marcado carácter español— se encontró ante un enorme reto, pero también una gran oportunidad. Su aproximación a este mito universal tendría que aportar algo nuevo.
Para ello —añade la nota— Inger decidió centrarse en el tema de la violencia, aproximándose a ella a través de una mirada “pura y no contaminada”: la de un niño.
Partiendo de este enfoque, Inger creó un personaje que propicia que el público se adentre en la historia desde su perspectiva.
El coreógrafo lo explica:
“Hay en este personaje un cierto misterio, podría ser un niño cualquiera, podría ser el Don José de niño, podría ser la joven Michaela, o el hijo nonato de Carmen y José. Incluso podríamos ser nosotros, con nuestra primitiva bondad herida por una experiencia con la violencia que, aunque breve, hubiera influido negativamente en nuestras vidas y en nuestra capacidad de relacionarnos con los demás para siempre”.
Las presentaciones de Carmen cerrarán un Festival de Ballet que contará con la presencia de varias estrellas internacionales (que protagonizarán una temporada de Giselle), el Buenos Aires Ballet y varias agrupaciones cubanas.
La apuesta de la compañía anfitriona, el Ballet Nacional de Cuba, dirigido por la primera bailarina Viengsay Valdés, es ofrecer un panorama de la creación coreográfica de ahora mismo, en diálogo con la tradición.
Desde mañana estarán a la venta las entradas para los espectáculos de la cita, en las taquillas del Teatro Nacional de Cuba.