La experiencia no es suficiente cuando se trata de enfrentar a un poderoso huracán como Ian, el cual se estima debe continuar incrementándose en la escala de Saffir-Simpson, e impactar el occidente de Cuba en las próximas horas.
Pinar del Río es uno de los territorios escogidos en el tránsito de estos fenómenos meteorológicos, y allí hay valiosos recursos humanos y materiales, entre ellos los tabacaleros y el tabaco, un producto único en el mundo.
En estos momentos hay 33 mil toneladas de las hojas recolectadas en campañas anteriores, que aún se conservan en almacenes, escogidas y otros depósitos, y por ellas han desplegado un intenso trabajo para resguardarlas en lugares seguros y taparlas con nailon para evitar que se mojen.
Esta es una de las medidas concebidas por la Defensa Civil Nacional: “Es imprescindible garantizar los aseguramientos y aplicar de manera racional el plan de medidas para estos casos”.
Durante una reunión del Consejo de Defensa provincial, Víctor Fidel Hernández, delegado de la Agricultura en la provincia, informó sobre las labores que desarrollan para bajar y proteger los techos de las casas de cultivo, y salvar los frutos que están aptos para el consumo en estas instalaciones.
Dijo además, que intensifican el trabajo para la protección de más de un centenar de toneladas de carbón vegetal y otras 3 mil de fertilizantes, así como para evitar pérdidas del ganado mayor.
Se trabaja aceleradamente en la cosecha de todos aquellos cultivos que se encuentran aptos para el consumo y que pudieran perderse, y en el traslado del ganado a sitios altos donde no haya peligro de inundación.
Los pinareños están acostumbrados a catástrofes de gran envergadura, aunque siempre es necesario adoptar nuevas medidas en aras de evitar el cruce de ríos y presas, o que los trabajadores queden aislados en zonas intrincadas, por lo que contribuirán a la evacuación de personas de los sitios vulnerables.
Minimizar los daños
El puesto de dirección del Ministerio de la Agricultura (Minag) emitió las primeras medidas a adoptar para la preparación y prevención. Una nota, publicada en su página institucional, pondera la garantía de alimentos de la avicultura, la existencia de los llamados files para la recolección de los huevos, así como la distribución a la canasta básica familiar.
Informan que están listas 16 formaciones especiales forestales, una en cada provincia y en el municipio especial Isla de la Juventud, con mil 490 hombres y los medios imprescindibles, entre ellos motosierras, camiones, cargadores frontales y grúas para resarcirse de los daños al patrimonio, y está seguro el abasto de agua para la masa avícola y porcina.
Con sacos de arena y tierra aseguran los techos de cubiertas ligeras de las instalaciones, priorizando las naves avícolas, porcinas y almacenes, y que hay madera para apuntalamientos necesarios.
Entre las orientaciones también están la protección de los productos que puedan mojarse como el carbón vegetal, alimentos para animales, fertilizantes y plaguicidas, y cosechan racionalmente los frutos propensos a sufrir afectaciones de pudrición, y aquellos que se encuentran en áreas de inundación, especialmente el plátano.
Los animales se trasladan a las zonas más altas o lugares donde no se produzcan inundaciones; desmontan las casas de cultivos en los lugares más próximos o a donde se espere llegarán los fuertes vientos y lluvias, parquean las máquinas de riego, sin gomas y disponiendo de sus anclajes.
Los órganos de dirección de todas las estructuras del Ministerio de la Agricultura están activados, para transmitir estas y las próximas orientaciones y recopilar informaciones.
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