Este sábado, como cierre del verano en la capital, tuvo lugar la jornada Raíces de la villa, en un nuevo espacio recreativo cultural que la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana (OHCH) y el músico Isaac Delgado están impulsando en la Avenida del Puerto.
El programa incluyó un primer segmento dedicado a los niños, con un concierto de Enid Rosales y su grupo. Para los adolescentes hubo danzas y performance, además de la comercialización de diversas propuestas de emprendimientos asentados en el Centro Histórico la Habana Vieja. El cierre fue con música: conciertos del grupo Síntesis y de Isaac Delgado.
“Este proyecto tiene siete años, fue una idea que desarrollamos de conjunto con el Historiador Eusebio Leal, declaró a esta reportera el destacado músico y compositor. Cuando se lo comenté por primera vez, me respondió con su peculiar sentido del humor: ‘Isaac, en realidad yo lo que quisiera es que a las 9 de la noche, cuando suena el cañonazo, todo el mundo se acueste a dormir’. Yo me asusté, pensé que era una negativa a mi propuesta, pero enseguida rectificó y me dijo, ‘Sí, me gusta’.
El proyecto presentado por Isaac tiene su fundamento en la cultura afrocubana: “El punto cero de nuestra música está en los puertos de La Habana, de Matanzas, de Santiago, por ahí entraron los conquistadores, los esclavos y todos los que vinieron después. Con ellos llegó la música y las influencias que tenemos hoy, no solo de españoles y africanos, sino también de Francia y otros países. Esa es la explicación de por qué el proyecto se llama Música Punto Cero”, explicó.
“Aquí pretendemos presentar un recorrido interactivo por la música cubana, empezando por el cajón, que fue lo primero que tocaron los esclavos pues era lo que tenían, hasta los más modernos tambores de hoy. En las presentaciones en vivo, aunque la gente me asocia a la música salsa, acogeremos diversos géneros y formatos. También tendremos espacio para muestras de artes plásticas, fotografía, miniteatro, y actividades para niños. Será un proyecto multicultural, polivalente, a tono con el mundo moderno, pero sin perder la esencia del lugar dónde estamos”.
“Yo estoy sorprendido de la aceptación que ha tenido esta primera jornada, sobre todo por la cantidad de público infantil. Este día acabó de convencernos de la necesidad de crear un espacio especialmente dedicado a ellos, así que algo haremos, al menos vez al mes, sobre todo para los pequeños de los barrios aledaños”.
El Chévere de la Salsa explicó que han previsto además organizar “una actividad semanal nocturna, siempre que no obstruya el proceso constructivo. La entrada será libre, por ahora, pero llegará el momento en que tendremos que cobrar un mínimo que ayude a financiar los servicios de limpieza, seguridad y otros”.
”Esto apenas comienza, estamos dándole vida a las dos naves que ocupará Música Punto Cero, construyéndole alas para que pueda volar. Será un espacio para la gente sencilla, inclusivo, ajeno a lo elitista, que además acogerá diversos emprendimientos, algunos de los cuales estuvieron en Raíces de una villa, y quedaron felices del resultado”, aseveró.
El destacado compositor sostuvo que Música Punto Cero está insertado en un proyecto mucho más ambicioso gestado por la Oficina del Historiador. Se trata de Habanía 500, el cual hospedará en esos antiguos almacenes de la Avenida del Puerto, considerados parte del patrimonio industrial del Centro Histórico, otras atractivas propuestas desde las cuales se incentivarán la vida sana y algunas de las tradiciones culturales cubanas, además de exhibir algunos de los resultados más notables del quehacer restaurador de las últimas décadas.