Aunque desde algunos puntos de la segunda mejor playa del mundo se observa el penacho de humo sobre la ciudad de Matanzas por el siniestro de la base de Supertanqueros, en Varadero existe tranquilidad, y el proceso turístico transcurre de manera normal.
Jorge Alberto García Domínguez, presidente del grupo empresarial hotelero Cubanacán, aseguró a Trabajadores que “todo funciona correctamente. Se mantienen las entradas y salidas de visitantes internacionales, al igual que las excursiones en el balneario y desde ahí hacia otros destinos del país”.
Se refirió a la adopción de medidas para garantizar los aseguramientos de combustibles, alimentos, bebidas y otros recursos “para evitar fallos en la operación turística, y también puedan disfrutar de los servicios de las instalaciones los clientes nacionales en este verano”, aseguró desde el yumurino hotel Velasco, instalación que recorrió en compañía de Jesús Lauzurique Suárez, delegado de Cubanacán en Varadero.
En funcionamiento se encuentran los 12 hoteles de la principal plaza cubana de sol y playa perteneciente a esta cadena, que posterior a los dos años de la pandemia han ido creciendo en los índices de ocupación, ahora por encima del 40 por ciento, manifestó Lauzurique Suárez.
El dirigente significó la tendencia creciente del mercado foráneo, que hoy se expresa de manera notoria en la preferencia por hospedarse en los hoteles Iberostar Selection Varadero, Royalton Hicacos, Sol Palmeras, Meliá Las Américas y Meliá Varadero, con las cifras más elevadas de huéspedes.
En el complejo Velasco-Louvre, único de la ciudad de Matanzas perteneciente en Cubanacán, se atiende a familiares de las 14 personas desaparecidas tras el colapso del tanque 51 de la base de Supertanqueros, explosión ocurrida sobre las 5 de la mañana del seis de agosto.
A pesar de la difícil situación que se vive en Matanzas, se vigila hasta el más mínimo detalle para que sectores de la economía, sobre todo los estratégicos como el turismo, mantengan su vitalidad. (Juanita Perdomo)