Con la entrega de los tradicionales Premios Lucía, el XVI Festival Internacional de Cine de Gibara concluyó este sábado en el costero municipio holguinero, tras cinco días de intensas jornadas culturales en las que pobladores y visitantes regresaron con fuerza al séptimo arte.
Mereció el Premio Lucía al mejor Largometraje de ficción Papicha (Argelia-Francia-Bélgica-Qatar), de Mounia Meddour, del que se destacó «la defensa de igualdad de derechos frente a la intolerancia y el oscurantismo religioso y cultural».
El hijo muerto, del cubano Maysel Bello, resultó el ganador en el apartado de cortometraje de ficción; mientras se le otorgó un premio especial al filme Los criminales (Francia-Rumanía-Turquía), de Serhat Karaaslan.
El mejor largometraje documental resultó Ophir, de Alexandre Berman y Oliver Pollet (Francia-Reino Unido); mientras que La comunión de mi prima Andrea fue galardonado como el mejor cortometraje documental.
El Premio Lucía a la mejor animación lo obtuvo Calamity. La infancia de Martha Jane Cannary, de Remy Chayé (Francia); a la vez que el jurado de documental y animación otorgó Mención especial a Mata, de Ingrid Fadnes y Fabio Nascimento (Noruega-Brasil).
En el cine Jibá, de la Villa Blanca de los Cangrejos, se cerró el certamen, que después de tres años de ausencia en esta costera región oriental por causa de la COVID-19 demostró lo fructífero y alentador de «Volver al Cine».
