No hemos llegado siquiera al primer cuarto del presente siglo y la situación económica, política y social está en crisis en la parte más desarrollada del planeta, aunque la mala noticia es que seguirá empeorando, según políticos y especialistas, lo que incluye a defensores del mundo unipolar.
Europa, una vez más, está en crisis y no precisamente por culpa de Vladimir Putín, al que se le acusa de cualquiera de los males que hoy padecen y padecerán millones de sus ciudadanos, que solo recuerdan con nostalgia la época de la abundancia.
Las noticias cada vez son más pesimistas, basadas en datos, estadísticas y en declaraciones de especialistas. Se refieren al mundo, y no solo a Europa occidental, EU y Canadá, ya que el planeta lo habitan otros miles de millones de personas.
Todo el mundo reconoce que el clima contribuye a que el malestar sea mayor, ese que tantas veces ha sido analizado en cumbres internacionales, pero que muestra su verdadero peligro.
Por solo citar un ejemplo, en los países que conforman la UE y la OTAN: las olas de calor que sufren España y Francia en julio, con el agravante que faltará, o será muy cara, la energía necesaria para combatirlo en casa, por lo menos en los dormitorios.
La crisis hizo ignorar promesas y metas en cumbres, conferencias y actividades diplomáticas de mandatarios y otros signatarios, lo que hizo pensar a muchos que se trabajaría para hacer menores los daños que provocaría, y ya provoca, en todo el planeta.
De la opulencia a la escasez
Europa se prepara para una posible crisis del gas, mientras que la demanda de energía crece ante la ola de calor. Robert Habeck, ministro alemán de Economía, dijo en julio que el país ·debe prepararse para lo peor”.
Los próximos meses serán cruciales para obtener suministros de gas y si “Rusia decide cortar por completo el suministro la situación será aún más grave y difícil», dijo Fatih Birol, director de la Agencia Internacional de la Energía.
Según el medio de prensa Bloomberg “muy pocos políticos europeos parecen entender la magnitud de la crisis que se avecina y sus costos”.
Veamos algunos titulares de la prensa europea :”ciudades alemanas desplegarán islas de calor pública para que la gente pueda calentarse. Además, aconsejan cerrar las cortinas, controlar el tiempo en la ducha, bajar la calefacción y comer menos carnes.
Lo peor aún no ha llegado
Wang Yiwei, director del Instituto de Asuntos Internacionales de la Universidad de Renmin, caracteriza a la OTAN por su mentalidad racista y de superioridad de civilización con respecto a Rusia, por fortalecer la confrontación ideológica y ser autosuficiente, así como pisotear el derecho internacional y el unilateralismo en nombre del multilateralismo.
Ken Moelis, fundador y director ejecutivo del Banco de Inversión Moelis advirtió recientemente que el aumento de los productos esenciales en algunos países pueden llevar a levantamientos sociales.
Cree que estamos presenciando el fin de la globalización. Hay países que tiene la capacidad de autoabastecerse y otros no, mientras la ONU advierte que los países vulnerables pagan ahora más por menos alimentos y advierte que la crisis alimentaria puede desembocar en una catástrofe global en 2023.
El ex premier británico Tony Blair, afirmó que la era del dominio occidental del mundo llega a su fin. Y bien lo sabe, por ser uno de los protagonistas de invasiones en el Medio Oriente.
Mientras, Irán y Rusia abandonarán el uso del dólar en su comercio bilateral, dijo Dimitri Peskov. y los cancilleres de ambas naciones anunciaron que darían a conocer un documento de cooperación estratégica entre Moscú Y Teherán. El 19 de julio el Presidente ruso llegó a Irán, donde sostiene encuentros con la dirección de esa nación y con el Presidente de Turquía.
Pero atentos, el BRICS crecerá y hará más fuerte a las naciones que la integren, así como favorecerá a los países del mundo subdesarrollado, ya que su visión es tener en cuenta a cada uno de los habitantes del planeta. Ya son varias las naciones interesadas.
Lamentablemente muchos europeos, estadounidenses y canadienses no se dan cuenta que las sanciones a Rusia impuestas por el trío bélico (USA; OTAN y UE) también les afecta a ellos y a su comodidad y esperan lo peor, la falta o insuficiente calefacción para sus hogares e industrias. ¡Qué mundo!
Material Relacionado
