Hace 30 años que el espíritu rojo y negro que caracteriza a las celebraciones por el 26 de julio, Día de la Rebeldía Nacional, no tocaba oficialmente en el norteño municipio camagüeyano de Sierra de Cubitas. Pero, la alegría llegó en este 2022 y, aunque no sea mucho el presupuesto, en todas las comunidades se sentirá que están en 26.
Como explicó Dinorah Martínez Hidalgo, presidenta de la asamblea municipal, de conjunto con la celebración se trabaja en unas 22 obras constructivas, “que buscan transformar el entorno y prestar mejor servicio al pueblo en los cinco Consejos Populares y 36 circunscripciones del territorio”.
Para ello cuentan con 14 millones de pesos que se concentraron en la resolución de 198 planteamientos de los pobladores. Y aunque algunas sean muy ambiciosas y se extiendan en el tiempo, otra motivación, el aniversario 102 de creado el municipio, el 28 de septiembre, los guía.
Entre las obras destaca la atención a viales importantes del territorio: la restauración de la Avenida Mario Herrero Toscano, con la construcción allí de una alameda, la reparación de la arteria que conduce a la comunidad de Vilató y de más de 10 kilómetros de la carretera que une los poblados de Sola y Puerto Piloto.
El sector de la Cultura, dice su directora municipal, Diana Pérez Calderón, “está muy contento. Nosotros acometemos varias obras importantes como es la reparación del techo y otros elementos en el cine. Allí, luego, podrá instalarse un proyecto sociocultural que reanimará la comunidad.
“También se pintó y permeabilizó el techo de la sala de video de la comunidad Cubitas, pero la obra más grande y que será para el futuro es la construcción del complejo cultural museo- biblioteca. Nuestro museo estaba en un local adaptado, pero ahora ganaremos en espacio y calidad. Y justo al lado del inmueble estará la biblioteca.”
Los cambios y restauración que se realizan en la plaza Mario Herrero Toscano, así como en los parques y entidades ubicadas en la arteria principal contribuirán, como alega Martínez Hidalgo, “a que el pueblo muestre una mejorada imagen”.
El sector de la Salud igualmente acomete acciones, destacándose la reparación de la Casa de Abuelos, con capacidad para 40 personas; el Centro de Salud Mental, el policlínico “13 de marzo”, así como diferentes consultorios del médico y la enfermera de la familia.
De igual manera se labora en el sector de Educación, donde dos centros educativos, uno de ellos ubicado en una comunidad en transformación, serán reparados.
Y es que como aseguran las máximas autoridades políticas del municipio, las acciones por el aniversario 69 de los asaltos a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes se deben sentir en todo el municipio. Por eso en las siete comunidades en transformación también se trabaja.
En ellas se realiza un cambio del entorno, se atienden a las familias vulnerables, así como a las madres con tres o más hijos, las cuales recibirán viviendas confortables.
“Son 147 familias en situaciones de vulnerabilidad y todas son atendidas. Para este año queremos entregar 10 viviendas, eso demanda esfuerzo, pero estamos trabajando en ello, porque somos uno de los territorios con más afectaciones habitacionales por el paso de ciclones y el cumplimiento de esa necesidad está a un 70%”, explicó Martínez Hidalgo.
Otro tema en el cual se concentran esfuerzos, continuó detallando la dirigente, es en el servicio de agua por pipas a unas 600 viviendas. “Y ese es un tema que debemos transformar, pues se ve muy afectado ante la carencia de combustible y equipos”, sentenció.
La producción de alimentos igualmente demanda un cambio ante la fecha histórica. Por eso, asegura la directiva, que se están limpiando más de 200 hectáreas de marabú para incrementar la producción, lo que ha permitido, que, en un primer momento, se siembren unas 50 hectáreas de yuca.
“Esta sede, puntualiza Martínez Hidalgo, por los festejos del 26 de julio se la debemos al pueblo cubiteño, el cual durante estos dos años se ha sacrificado y ha evitado que la economía decaiga. Queremos que el pueblo luzca bonito, pero igualmente estamos rescatando servicios, como el de restaurante, recordando la historia y transformando, para bien, la vida en Sierra de Cubitas”.
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