Alejandro, uno de los jóvenes que este domingo acompañó al Primer Secretario del Comité Central del Partido Presidente cubano en una jornada productiva en áreas de la granja agropecuaria artemiseña 16 de Abril, fue el primero en hablar, “rompió el hielo”, como decimos en Cuba. Fue breve: manifestó la disposición de la juventud a continuar su participación en lo que el país necesite.
Así se iniciaba el diálogo entre el compañero Miguel Díaz-Canel Bermúdez con jóvenes de muy diversos sectores de la sociedad; en respuesta a ese sentir el Presidente cubano declaró su total confianza en nuestra juventud. “Sentimos el pleno apoyo de ustedes todos los días”.
Entre otros temas el diálogo versó sobre el añejo memorándum estadounidense que desde temprana fecha oficializaba el bloqueo económico, comercial y financiero al pueblo cubano para que el descontento popular se vertiera contra la Revolución.
“Tenemos que enfrentar esta batalla económica en las condiciones más difíciles, como ningún país del mundo”, dijo el mandatario, quien reconoció la participación de los jóvenes en ese combate.
¿Qué derecho tiene otro país de imponerle a un pueblo asfixia económica para que vaya contra lo que ese pueblo ha decidido?, se preguntó Díaz-Canel, y expresó que en el hilo conductor de ese pensamiento está el odio, la política hegemónica de colonización cultural con que buscan que fracturemos nuestro compromiso con las raíces, con las esencias. “Hay que ponerle pensamiento desde los jóvenes al tema de la política cultural hegemónica. No podemos dejar que nos penetren con odio”, subrayó.
Asimismo destacó el tremendo esfuerzo de los trabajadores electroenergéticos, reiteró la estrategia respecto a la recuperación de ese sector y lamentó el incendio en el bloque 2 de la termoeléctrica de Felton. “Pero no es tiempo de amilanarse”, sentenció.
El amor por encima de todo el odio
En contraposición a los deseos de nuestros enemigos, Díaz-Canel destacó que nuestro pueblo, con amor, va por encima de todo el odio que nos tratan de sembrar y que “trataron de plantar en los sucesos del 11 de julio del 2021. Fue un desagradable momento y nosotros vamos a celebrar el primer aniversario de cómo la Revolución, el pueblo cubano, con su juventud, derrotó el intento de un golpe que no era tan suave. Era un golpe vandálico contra la Revolución y vencimos en menos de 24 horas”, dijo.
Esa victoria cubana la catalogó como una derrota más del imperialismo. “Esa es la verdadera verdad, no la otra que tratan de pintar para justificar la derrota”, puntualizó, y resaltó que a diario están convocando manifestaciones en Cuba, hechos violentos.
Afirmó asimismo que la Revolución sí se está revolucionando, pero lo hace como nadie, en un escenario difícil, complejo, de constante asedio económico, político, ideológico, mediático. “Si estamos aquí es porque hemos podido revolucionarnos. Estoy convencido de que vamos a salir de esta situación compleja que tenemos. Y vamos a salir patentizando cada vez más este concepto de resistencia”.
Al responder a una interrogante de la prensa, Díaz-Canel señaló que puede haber un determinado resultado en las elecciones de medio término de los Estados Unidos, pero los intereses del imperialismo y sus interdependencias y sus interconexiones internas hacia Cuba siguen siendo las mismas.
Finalmente expresó la convicción de que el bloqueo tenemos que superarlo por nosotros mismos, sin esperar ningún cambio. “Si hay algún cambio bienvenido sea. Mas para que haya cambios, el problema no es solo que ellos quieran cambiar, sino cómo van a cambiar, y tiene que ser en una posición de igualdad, de respeto”.