A golpe de jonrones, dos de Guillermo Avilés en el triunfo de Granma sobre Ciego de Ávila (8-2), y uno decisivo del matancero Erisbel Arruebaruena para definir el 5-4 frente a Sancti Spíritus, colocaron las series semifinales a punto de mate, pues Alazanes y Cocodrilos solo necesitan un triunfo para reeditar la discusión del título de la pasada campaña.
En el estadio José Ramón Cepero, la orquesta ofensiva visitante comenzó rápido las acciones, al marcar racimo de cuatro anotaciones en el mismo capítulo inicial, gracias a enorme cuadrangular con bases llenas – el clásico Grand Slam- del receptor Iván Prieto frente al abridor Luis Marrero, lo cual hubiera bastado para decidir el encuentro.
Aunque los tigres avileños descontaron una en el segundo para animar a los miles de aficionados que desafiaron el sol para apoyarlos, en la conclusión del tercero la sentencia de los actuales campeones se reafirmó con el primero de los dos vuelacercas de Avilés, quien encontró a un compañero en circulación, Osvaldo Abréu.
La misma dosis estuvo a punto de repetirla en el cuarto inning, pero le faltaron escasos centímetros; mientras en el sexto sí “la llenó entera” y volvió a desaparecer la esférica por el bosque izquierdo, para anotarse cuatro empujadas en el cotejo. “Saqué dos buenas conexiones, aunque mi respeto para ese equipo con el cual jugué de refuerzo en una ocasión”, dijo al término del partido Avilés.
Del resto se encargó Yunier Castillo, quien lanzó siete entradas muy cómodo, con cinco ponches y apenas tres sencillos permitidos. Para sellar el éxito Kelbis Rodríguez sacó los último seis outs. Ahora solo es cuestión de esperar, pues nadie ha remontado en postemporadas cubanas un 3-0. Fue esta la séptima victoria consecutiva de los granmenses sobre la tropa avileña en play off pues la última vez que se enfrentaron fue en la final de la 56 edición, cuando los barrieron 4-0 y se titularon monarcas.
Para el juego de este martes en el propio parque de los tigres está anunciado el duelo Yander Guevara-César García.
Mordida de unos cocodrilos batalladores
Los Gallos de Sancti Spíritus tuvieron este lunes que reponerse a la primera noticia del día: su as Yuen Socarrás no podría subirse al box porque padecía un fuerte estado gripal. De ahí que el rol de abridor le tocó a José Luis Braña, quien contuvo hasta donde pudo a los toleteros orientales, para preservar una ventaja inicial de dos carreras, que se amplió a cuatro en el quinto.
Fue en esa mitad del juego cuando ocurrió la primera rebelión yumurina que no se detuvo hasta descontar tres rayitas en el marcador, con un doble clave del capitán Arruebaruena, quien remolcó dos y mandó a las duchas a BrañCa. En su próximo turno al bate, al iniciarse el octavo inning, el propio torpedero sentenció el marcador con su tercer cuatroesquinazo de la postemporada actual, que empujó a Jefferson Delgado desde segunda.
Para sostener y respaldar un marcador tan cerrado, el zurdo Yamichel Pérez realizó la mejor faena de un lanzador abridor en todo lo que va de play off, pues tiró completo – a ritmo de 132 lanzamientos- con apenas cuatro ponches, dos boletos y ocho indiscutibles permitidos. De esta manera, los matanceros no tuvieron que echar mano a su debilitado bullpen.
Este match continuará este martes y de imponerse los visitantes habrá concluido todo y estarán envueltos como lanzadores: Socarrás si ya está mejor y Dariel Góngora.
De concretarse ambos triunfos de Alazanes y Cocodrilos, la final de la 61 Serie Nacional será un remake de lo vivido en la pasada contienda,