Representantes de Cuba agradecieron hoy a China por pronunciarse en contra de que Estados Unidos excluya a países cuando acoja la Cumbre de las Américas, una decisión considerada otra maniobra de Washington para imponer sus intereses.
El embajador de la isla en Beijing, Carlos Miguel Pereira, expresó la gratitud de su Gobierno por el apoyo de Beijing frente a una medida también rechazada en América Latina y El Caribe porque pretende dejar fuera a Cuba, Nicaragua y a Venezuela de un foro hemisférico.
Según remarcó, la oposición a esa práctica refleja el desacuerdo con la falta de credibilidad de la administración demócrata en el manejo de su política exterior y con la apuesta por presionar a los estados que no son de su agrado.
El diplomático denunció que la Casa Blanca trata de dividir y usar el derecho internacional a su antojo, aplicar el multilateralismo selectivo cuando le conviene y resucitar la llamada Doctrina Monroe en las relaciones con sus vecinos.
“Una vez más queda claro que Estados Unidos carece de la posibilidad de imponer sus designios, intereses y posiciones en Latinoamérica y El Caribe, que han cambiado lo suficiente para dejar de ser el patio trasero”, indicó en rueda de prensa.
Pereira comentó que aun antes de comenzar, el cónclave ya fracasó en los objetivos de apartar a Cuba, Nicaragua y Venezuela del debate de los asuntos en agenda
“Cuba, esté presente o no físicamente en la Cumbre de las Américas, es y será un tema de la Cumbre. Su voz estará presente de muchas maneras tanto en la cumbre oficial como en la llamada Cumbre de los Pueblos”, acotó.
Se refirió al deseo del subcontinente de alcanzar una integración que permita solucionar y encarar los principales desafíos de la zona.
En ese punto, contrastó el carácter excluyente e imperial de la Organización de Estados Americanos con la aspiración de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños de fomentar la unidad sobre la diversidad de sus integrantes.
Durante el encuentro, Pereira también actualizó a la prensa acerca de los resultados de la XXI Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos que sesionó en La Habana la semana anterior con líderes de sus 10 naciones miembros.
Igualmente, abordó la posición de Cuba respecto a la reciente visita a China de la alta comisionada de la Organización de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet; ratificó el rechazo a la politización del tema y a su uso como forma de injerencia en los asuntos internos de cualquier país. (Tomado de Prensa Latina)
