Alejandro Gil Fernández, vice primer ministro y titular de Economía y Planificación realizó una exposición sobre la actividad económica, que durante los primeros meses del 2022 presenta una recuperación gradual.
Al referirse a la exportación de bienes hasta marzo explicó que alcanza los 590 millones de dólares, mientras la actividad del turismo evidencia una tendencia creciente en los cuatro primeros meses cuando han arribado 450 mil visitantes. Se mantiene la meta de recibir 2,5 millones al cierre del año, en tanto ponderó el crecimiento del turismo nacional.
Agregó que los ingresos totales en divisas del país ascienden a 2 mil 397 millones de dólares, muy por debajo todavía de la cifra en igual período en años anteriores a la COVID-19. La importación de bienes también es superior, pero se debe fundamentalmente al precio.
En cuanto al acopio de productos agropecuarios señaló que aunque se registra un aumento de viandas, hortalizas y leche entregada a la industria respecto al año 2021, existe insatisfacción para responder a la demanda que exige la población.
Respecto a la circulación mercantil argumentó que se observa un incremento, aunque la solución para ello sigue radicando en una mayor producción nacional. Sobre la actividad empresarial expresó que se aprecia un cumplimiento del plan al 109 %, pero aún se perciben pérdidas en 411 empresas.
En ellas se identifican variables que afectan su rentabilidad como malas confecciones de las fichas de costo, demasiados trabajadores indirectos y planes muy por debajo de sus potencialidades.
Gil valoró que la productividad del trabajo es superior al 12 % de lo que dictaba el plan, sin embargo está demostrado que hay reservas, porque lo más importante es revisar la calidad de esos planes de producción con los que cada empresa se comprometió.
Comentó que se crearon 92 empresas filiales, que tienen un efecto favorable en el tejido productivo del país, al tiempo que valoró como de amplio impacto lo logrado en el vínculo Universidad-empresa. Un aparte dedicó a los nuevos actores económicos, los cuales tienen que formar parte de la estrategia del desarrollo local, a partir de políticas públicas que se divulguen más.
El impacto que pueden tener estos nuevos actores es significativo con más de 50 mil empleos generados; y el titular económico de Cuba reiteró que todo esto y más indica que estamos en una recuperación gradual, a pesar de las diversas complejidades y la caída del 13 % del producto interno bruto. “No podemos hablar de crecer, sino de recuperar el terreno perdido”, precisó.
El Vice Primer Ministro detalló que la inflación acumulada es real y se trabaja para reducirla, pero no a través de subsidios porque no es correcto. “Más que concentrarnos en bajar los precios debemos aumentar la capacidad de compra de los ingresos provenientes del trabajo”, dijo. “Quisiéramos ir más rápido, pero hay un escenario internacional complejo”.
De ahí entonces, añadió, la necesidad de actualizar la Estrategia Económica y Social con 158 medidas, las cuales se concentran en lo prioritario del país y contribuirán a avanzar con mayor celeridad en la reactivación económica. Por su importancia profundizó en algunas de las más significativas y que mayor impacto pudieran tener en la población y los actores económicos.
“Son medidas audaces, valientes e innovadoras, pero no son mágicas. Poco a poco nos vamos recuperando, la velocidad con que lo hagamos depende de factores externos, pero también de nosotros, de nuestra producción nacional”, concluyó Gil Fernández.