No puede escribirse ni hablarse de lo hecho durante más de 100 horas en el hotel Saratoga, de la capital cubana, después del accidente que destruyó casi totalmente la edificación sin mencionar la palabra héroes.
Bomberos, especialistas en salvamento y rescate, integrantes de la Cruz Roja, paramédicos, miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) y el Ministerio del Interior, dirigentes partidistas, gubernamentales y de diversos ministerios…, y también constructores abnegados, voluntariosos, consagrados…
Cuando la situación lo permitió llegaron los dignos nombres de los cascos blancos, como los calificara el Comandante en Jefe Fidel Castro a quienes laboran en el sector de la Construcción, con grandes equipos: retroexcavadores, cargadores frontales, camiones…, con el propósito de ejecutar las acciones que se orientaran, a fin de abrir paso, recoger y trasladar escombros, dejar las calles libres de ellos…
Los medios de comunicación se han hecho eco de que un grupo de ellos la laborado sin descanso en esas faenas imprescindibles y a la vez peligrosas, específicamente de los contingentes Blas Roca Calderío y Raúl Roa García, y la Empresa Constructora de Obras de Ingeniería (Ecoing) número 5, de La Habana, entre otras.
Expertos han explicado que la maquinaria pesada ha resultado imprescindible en la extracción de escombros, debido a los elevados volúmenes acumulados y al peso de los mismos.
Más de 60 camiones, cargadores frontales, retroexcavadoras y un equipo especializado en demolición, con sus operadores respectivos y directivos al frente, se han mantenido de manera permanente en el Saratoga.
Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) en La Habana, informó este miércoles a través de un espacio informativo de la TV Cubana, que a partir de ahora se laborará con maquinaria más pequeña, para poder entrar hasta donde las condiciones estructurales lo permiten y seguir abriendo paso en el interior.
Las reparaciones de las aulas y otros locales de la escuela primaria Concepción Arenal son ejecutadas por una empresa constructora capitalina y deben finalizarse en los días finales del presente mes. Las del teatro Martí demorarán más debido a la complejidad y singularidad arquitectónica de la edificación.
En la zona accidentada han estado de manera reiterada René Mesa Villafaña, ministro de la Construcción; directivos de las Organizaciones Superiores de Dirección Empresarial (Osde), y directores, especialistas y técnicos de empresas y otras instituciones de ese sector.
[image_carousel source=»media: 316673,316672,316671,316670,316669,316668″ limit=»41″ slides_style=»minimal» crop=»4:5″ columns=»2″ align=»center» captions=»yes» link=»image» autoplay=»2″ speed=»slow» image_size=»full»]
Material Relacionado
