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Una “Nina” entre gallos

De la mano de su madre salió por primera vez de Holguín la jovencita Claudia Arévalo Rubio para participar en la competencia de baile urbano Top One Fight (T1F), que por segunda ocasión sucedía en Camagüey durante la celebración del Festival Nacional de Rap Trakeando, que se desarrolló del 17 al 19 de marzo.

 

Nina, con los miedos de la primera vez, supo mostrar en la competencia de baile urbano Top One Fight que las mujeres también pueden ser exponentes del género urbano. Foto: Alejandro Rodríguez Leiva

 

No iba como simple espectadora. No. Por primera vez desde que se inició en el mundo del baile callejero, específicamente en el del hip hop, había decidido participar en una competencia y la habían escogido.

“En este mundo, explica, no son muchas las mujeres. Hay algunas muy buenas y otras que aún no se atreven a competir, pero yo les aconsejaría que lo hicieran.

“Para mi es algo muy productivo y para ellas también lo pudiera ser. Con este evento crezco espiritualmente y me gano mi respeto y el de los demás. Además, demuestro que las mujeres sí pueden y sí podemos estar en una cultura tan fuerte y representativa como esta”.

Desde los ocho años a Nina se le metió en la cabeza el baile callejero por películas que había visto, pero no fue hasta hace dos años que comenzó a enfocarse en ello profesionalmente.

Para su familia era una locura y lo primero que le pidieron era que no podía dejar su carrera de Informática. Ella lo prometió y en sus ratos libres busca apoyo en la calle, ve muchos documentales sobre la cultura hip hop, no solo del baile, sino, además, de su historia y elementos que la caracterizan.

“Hay personas, dice, que no entienden que esto es más que una batalla de baile. La cultura hip hop surgió por una necesidad de expresión, de conexión con uno mismo, de sentir y hacer sentir a los demás.

“El baile requiere de mucha destreza física, por eso hago mucho ejercicio, pero también ejercito la mente. Además, debemos concentrarnos en la música, pues eso es lo que el bailarín muestra y expresa”.

En el T1F Nina no ganó, le faltaba experiencia y quizás más destreza, pero en su primer asalto se impuso y se ganó el aplauso masivo de un auditorio, que vio en sus movimientos a una mujer de pelea que también realza a la cultura del hip hop y del rap.

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