El compromiso de continuar elevando la calidad de los servicios para mejorar la salud y la vida de los cubanos fue señalado hoy por el Titular de Salud Pública, doctor José Ángel Portal Miranda, durante el balance del Comité Nacional del Sindicato de los Trabajadores de la Salud (SNTS).
Durante la vídeo-conferencia, Portal Miranda valoró de “imprescindible” el trabajo del sindicato, unido al de la administración,para convocar a los trabajadores en función de los desafíos que están por delante.
Mencionó las prioridades del sector, entre las cuales están —en primer lugar— la recuperación de las consecuencias de la pandemia.
De igual manera, el uso racional de los recursos y la capacidad del sector para generar otros; el enfrentamiento al delito, la corrupción, las indisciplinas; la labor efectiva y directa con los jóvenes; el cuidado de las instalaciones en medio de las limitaciones; la atención al sector empresarial, incluyendo el sistema de farmacias.
Exhortó a brindar una mayor atención al Programa del Médico y la Enfermera de la Familia, pilar fundamental y fortaleza del sistema de salud pública, que durante estos dos años de pandemia hay desempeñado un rol primordial.
Otorgó gran importancia al trabajo político-ideológico, lo cual implica liderazgo, ejemplo, diálogo abierto con los trabajadores. “Hay que saber cómo piensan y darles argumentos. Es la responsabilidad que todos tenemos, de lo contrario no van a creer en los líderes administrativos y sindicales. Y ese es el camino si queremos lograr un mayor compromiso ante los problemas”.
Al presentar el informe del balance anual, el doctor Santiago Badía González, secretario general del SNTS, reconoció que le corresponde al sindicato incidir en las deficiencias que se han identificado como organización y que incluye, entre otras, el fortalecimiento de las estructuras sindicales en las unidades de salud del primer nivel de atención; trabajar en la idoneidad de los dirigentes de base; potenciar la participación de los trabajadores en las actividades de la ciencia y la innovación, e incentivar el movimiento político Colectivo por la excelencia en los servicios, la docencia y la Investigación.
Entre otras dificultades están lo relacionado con la política de cuadros, a partir de la inadecuada labor con las reservas, así como en lo que concierne a la emulación, de manera especial con la cantera de condecoraciones y la calidad de los expedientes, pues los territorios no hacen las propuestas al sindicato nacional y tampoco trabajan por declarar colectivos Destacados en la Salud.
Una intervención muy acertada resultó la del doctor Joel Pérez García, vicejefe del departamento de Atención al sector social del Comité Central del Partido, quien habló de la necesidad de transformar las maneras de hacer no solo debido a la persistencia de la pandemia de la COVID-19, sino a la compleja situación geopolítica que vive el mundo con el actual conflicto ruso-ucraniano, cuyas consecuencias se verán a mediano y largo plazo.
El dirigente llamó a dar un vuelco al trabajo sindical, no solo exigiendo derechos, sino también deberes, y expresó que la primera función —de conjunto con el Partido, y la administración— es educar, instruir, para que los trabajadores comprendan el papel que les corresponden desempeñar en nuestro modelo social.
En relación con la Atención Primaria de Salud, consideró imprescindible empoderar a los trabajadores para lograr los cambios necesarios que en este nivel se requieren, y eso —subrayó— no se alcanza solo con medidas administrativas.
Sobre el Programa Materno Infantil dijo que hay que ir más allá de las visitas a los lugares, pues hay problemas de actitudes y aptitudes. Acompañar —aseveró— no es visitar, no basta con eso, sino lograr que todos los trabajadores y afiliados comprendan las problemáticas existentes y se movilicen para transformarlas.
El reto está en concretar lo que conceptualmente estamos claros, por lo que tenemos que empezar a hacer las cosas de una manera diferente, actuar con agilidad, pues lo exige el pueblo y nuestros propios trabajadores, manifestó.
En esa propia línea de pensamiento usó la palabra la miembro del Secretariado Nacional de la Central de Trabajadores de Cuba, Consuelo Baeza Martín, quien reconoció el quehacer de este sindicato en tiempos de pandemia, con la movilización y el comprometimiento de los trabajadores, así como los esfuerzos para brindar una atención de excelencia al pueblo.
Subrayó la importancia del funcionamiento de las estructuras en la base, “ahí es donde está la gran debilidad”, en los policlínicos, en los hospitales, y se pronunció por transformar los sistemas de trabajo, con una mirada renovadora, pues hay un grupo de problemas que se repiten y ya son viejos.
Confirió gran valía a la preparación de los cuadros y señaló como una prioridad para el movimiento sindical las reuniones de análisis del plan y el presupuesto, donde deben estar presente los dirigentes sindicales y los administrativos, “pues es una responsabilidad compartida”.
Al referirse a las motivaciones para celebrar el Primero de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores, mencionó el aniversario 170 del natalicio del Apóstol José Martí en el venidero año, el heroísmo del pueblo cubano, de los trabajadores del sector de la salud, y de los jóvenes que son la continuidad de la Revolución.
En la reunión de balance intervinieron, además, el viceministro Luis Fernando Navarro Martínez; Eduardo Martínez Díaz, director del grupo empresarial BioCubaFarma, y a través de la vídeo-conferencia varios secretarios generales de los comités provinciales del sindicato, quienes entre otros temas abordaron la política de cuadros, el Programa Materno Infantil, la Atención Primaria de Salud, y el quehacer sindical en función de alcanzar las metas propuestas.
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