Gabi & Sofi, la premiada marca cubana de juguetes didácticos y artículos para niños, diversifica sus producciones y se atreve con la nueva incursión en el mundo de la música y el audiovisual, y se lanza con dos discos y más de 10 videoclips dirigidos al mercado infantil, informó a Trabajadores Laura San Marful, especialista de la cooperativa Decorarte, radicada en Varadero, Matanzas.
En este proyecto musical se estrenan como solistas Gabi y Sofi, los niños que inspiraron y dieron nombre a la marca cubana, que comenzó como un emprendimiento hace más de 6 años, durante los cuales ha acumulado éxitos y reconocimientos no sólo por los juguetes didácticos, sino además por la instalación de parques temáticos, ropa para niños, decoraciones para productos de exportación, entre otros.
Semillita Azul, de la cantautora Lindiana Murphy y Somos Niños, de la autoría de Ariel Balmaseda, creador de Gabi & Sofi, son los nombres de los dos fonogramas creados bajo el sello de la Casa Discográfica y Editora Musical Producciones Colibrí.
Ambos discos fueron pensados para inculcar en los menores el gusto por la música y el arte en general, el amor por la naturaleza y la familia, las relaciones humanas y la vida sana, desde la óptica de un niño y a partir de los conceptos que promueve Gabi & Sofi, explicó Laura.
El trabajo musical se distingue por el uso de diversos recursos novedosos para mostrar a los pequeños y a la familia en general, que existen diversas opciones que pueden despertar interés en ellos y que, a su vez, son aptos para la infancia en cuanto a musicalidad, sonoridad y contenido, aseguró.
Otro de los productos más jóvenes de la marca, es el audiovisual El Gallinero, que pertenece al disco Somos Niños, en el cual participan además niños de la Compañía de Teatro Musical Infantil Abrakadabra, de Cienfuegos, bajo la dirección musical de Dustin Polo, es una parodia sobre la vida de los adultos en un barrio cubano.
Desde el 2016, Gabi & Sofi se ha dedicado a la producción de juguetes didácticos y artículos para niños con el objetivo de elevar el espíritu y el humanismo de los más pequeños sobre la base de la no violencia y la formación de valores; y con este mismo concepto, se adentra en las producciones musicales y audiovisuales con canciones que tocan temas universales, pequeñas historias cotidianas y aspectos que reflejan la actualidad, vistos desde la inocencia de los niños pero cargados de detalles que mueven también el pensamiento y la reflexión de los adultos, aseveró Laura San Marful.