La Central de Trabajadores de Cuba en la provincia santiaguera favorece el intercambio entre sus afiliados y especialistas de las ciencias jurídicas en aras de ampliar el conocimiento en torno al Proyecto del Código de las Familias que entre febrero y abril será sometido a consulta popular.
Con el liderazgo de la organización proletaria profesores de la facultad de Derecho de la Universidad de Oriente, y letrados de otras estructuras del sistema judicial en la provincia, acuden a centros laborales de alta concentración de trabajadores para esclarecer dudas, precisar ideas, y comentar detalles en relación con el contenido de esa norma legal.
Colectivos como los de la Refinería Hermanos Díaz, la Extrahotelera Palmares, la unidad económica de base Tabaco Torcido, y la Dirección Provincial de Deportes, Cultura Física y Recreación han protagonizado el importante momento de intercambio.
Según Zenaiby Leyva, miembro del secretariado provincial de la CTC, la iniciativa ha sido bien acogida y agradecida por parte de los afiliados, mientras que los juristas involucrados en dicha acción se muestran motivados al comprobar el elevado interés que existe en este segmento poblacional de profundizar en todo lo relacionado con el cuerpo normativo que debe aprobarse en el país.
Asuntos como el matrimonio y la unión de hecho, los derechos de los adultos mayores y de los cuidadores, la maternidad y la paternidad, la protección de la niñez, la adolescencia y la juventud, entre otros, son cuestiones que generan el mayor número de interrogantes que esclarecen los especialistas en estos temas.
El objetivo supremo de la CTC en Santiago de Cuba con la materialización de esta iniciativa es preparar mejor a los trabajadores para el momento de la consulta popular sobre la base de lo reiterado en diferentes escenarios así lo señaló Yamila González Ferrer, vicepresidenta de la Unión Nacional de Juristas de Cuba y miembro de la comisión redactora del nuevo Código:
“Queremos que nuestra población conozca todos los beneficios que tiene esta ley, que no impone modelos, que no le quita derechos a algunas personas para dárselos a otras; sino que posee una capacidad abarcadora de dar opciones y alternativas para la solución de los conflictos familiares”.