Con un llamado a que se despojen de ataduras formales y esquemas propiamente informativos se realizarán en Camagüey más de cuatro mil 830 asambleas para la presentación del plan y el presupuesto económico.
Como cada año, en estos encuentros, según precisó Agustín Arribas Rodríguez, miembro del secretariado provincial de la CTC, se mostrará el cierre de la emulación del período anterior, los mejores trabajadores, se valorarán los resultados, se aprobará el plan temático de la Anir y se presentará el plan de la economía.
“Pero esa fase de presentación, acotó el sindicalista, debe ser diferente. Vivimos tiempos convulsos y complejos, pero hay que centrarse en cómo producir y ser eficientes, a pesar de las carencias de materias primas y recursos que nos provoca el bloqueo económico y financiero y la presencia de la Covid-19.
“En estos últimos meses la economía del mundo y de Cuba ha sufrido una contracción; se sabe lo difícil que se nos ha vuelto la vida, pero a pesar de todo eso los trabajadores debemos entender que, si participamos en ese plan y nos sentimos parte de él, se podrá cumplir.
“Debemos buscar las reservas, ser productivos y organizados. Igualmente, los mecanismos y sistemas de pagos deben ser analizados para que motiven a los trabajadores a cumplir los planes, a que los servicios satisfagan a la población y para que continuemos los procesos sociales”.
Según añadió Arribas Rodríguez, para poder motivar esa participación de los trabajadores, los dirigentes obreros deben jugar un papel fundamental. “Eso, detalló, puede ser una debilidad en nuestra provincia pues hay un 30% de los cuadros que se enfrentan por primera vez al proceso. Ellos fueron preparados y capacitados, pero estamos conscientes de que requiere de un acompañamiento por parte de los que tenemos la responsabilidad de asesorarlos.
“El éxito de esas asambleas radicará en que podamos motivar realmente el empleo de esas reservas para cumplir los planes”, subrayó.
Hasta el momento, en el territorio agramontino se han realizado más de 50 asambleas, principalmente del sector azucarero. En ellas, entre otros temas, se ha analizado el ahorro de energía eléctrica, pues la inestabilidad de la molienda ha provocado que en el horario del mediodía estas unidades deban emplear energía del Sistema Energético Nacional.
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