Laritza Martínez Dive, vecina de calle 2da. no. 87 entre C y Final, en Camagüey, pide ayuda para su hermano, quien “recientemente cumplió 65 años y posee su expediente de trabajo con 30 años de servicio.
“Como solución le dijeron que debía trabajar al menos un año con el nuevo salario para poder jubilarlo. He llamado a la Comisión de Atención Social, a la Dirección Provincial de Trabajo para preguntar que dónde va a trabajar con esa edad y sus condiciones de salud, pues él no dejó de trabajar por gusto.
“Su empresa desapareció. Él vivía en una zona rural y no había otro tipo de empleo. Actualmente vive conmigo, en un núcleo de cuatro personas (él, mi hija enferma, mi nieto y yo con 59 años).
“Yo soy la que trabajo y necesito que me ayuden a encontrar una solución para mi hermano, pues si yo falto pudiera quedarse desamparado y sin protección financiera. Con la pandemia me resulta difícil seguir haciendo trámites”.