Un Borussia Dortmund totalmente desdibujado en la primera mitad supo reaccionar y, con un sprint final tremendo, voltear (2-3) los dos goles del Eintracht Frankfurt, obra del colombiano Santos Borré, para colocarse a solo seis puntos del Bayern Múnich, que pinchó este viernes ante el Gladbach (1-2).
El doblete del Borré, su primero en Alemania, plasmó la superioridad del cuadro local en los primeros 45’. A pesar de que Meunier avisó antes que nadie con un trallazo que repelió a córner su ex compañero en el PSG, Kevin Trapp, fue el ex de River Plate quién aprovechó en el 16’ un mal endémico de los de Marco Rose: el balón parado.
Kostic, un seguro de vida en este tipo de acciones, la puso al corazón del área y Borré hizo subir el 1-0 al luminoso anticipándose a Bellingham. Una vez disipadas las dudas con las que empezó el encuentro, el Eintracht dobló su ventaja aprovechando la poca contundencia de la zaga amarilla. Corría el 23’ cuando a Marco Reus se le fue largo un control en su propia área, un regalo que Borré no desaprovechó para batir por bajo a Kobel.
Postes de Ndika y Malen
Lejos de espolearle, el segundo tanto noqueó todavía más a un Dortmund que pudo irse al descanso perdiendo por una diferencia todavía mayor de haber estado algo más acertados de cara a gol los pupilos de Oliver Glasner. Kostic, en dos ocasiones, y Ndika, con un remate a quemarropa que repelió el poste, pusieron sobre aviso al Dortmund antes de que, en la última jugada del primer acto, Malen tuviera la más clara de los visitantes al estrellar en el palo un rechace tras paradón de Trapp.
El danés Lindström tuvo la oportunidad de darle la puntilla tras el paso por vestuarios, pero en el mano a mano con Kobel remató centrado y ahí fue el principio del fin para el Eintracht. Haaland fue activándose poco a poco y la entrada de Thorgan Hazard acabó por cambiarle la cara al partido. Precisamente en una combinación entre ambos llegó el 2-1 a 20’ del final, que dio paso al asedio ‘borussier’. En el 86’, Bellingham cabeceó al fondo de las mallas un gran servicio de Meunier desde la derecha y solo tres minutos después, Dahoud recogió un balón muerto en la frontal del área y completó la remontada visitante con un golazo que aprieta la Bundesliga.