El secretario general del Sindicato Único Nacional de Trabajadores de la Construcción y Similares de Panamá, Saúl Méndez, rechazó hoy el entreguismo a Washington de gobiernos locales neoliberales, 32 años después de la invasión militar de Estados Unidos.
En una congregación frente a la embajada del país norteño en repudio a la agresión, Méndez criticó a ejecutivos lacayos que no quisieron registrar la verdad sobre lo que llamó acto vil y cobarde de la madrugada del 20 de diciembre de 1989. Entonces, dijo, las bombas gringas sesgaron la vida de militares honestos y, sobre todo, de civiles inocentes en barrios humildes.
Secretario general @SaulAlFrente #ProhibidoOlvidar
La historia panameña está marcada de lucha y el 20 de diciembre de 1989 no fue la excepción.
Exigimos justicia pic.twitter.com/uOiF7p83Xu— Suntracs Oficial ⚒ (@suntracs1) December 20, 2021
Aquel enfrentamiento, dijo, no solo provocó la invasión unilateral e injerencista, sino que también desencadenó políticas económicas neoliberales y las privatizaciones de empresas estratégicas como las telecomunicaciones, electricidad, puertos y ferrocarriles, entre otras.
Duele e indigna, aseveró, que las bombas gringas masacraron al pueblo en el barrio mártir de El Chorrillo, en Chorrera y en la caribeña provincia de Colón. La historia no se puede olvidar, remarcó.
Otros dirigentes de la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente presentes en la manifestación también condenaron la agresión.
Como un símbolo de lucha que continúa dejaron en las vallas de seguridad de la legación diplomática de Estados Unidos, en las inmediaciones del Canal, donde otrora radicara el Comando Sur, la insignia nacional, banderas del gremio y carteles con lemas como Yankis asesinos.
En el acto, líderes gremiales saludaron la victoria la víspera en elecciones presidenciales de Chile del joven izquierdista Gabriel Boric y llamaron a seguir ese ejemplo en las contiendas emancipadoras del continente.
Este lunes movimientos sociales también protagonizarán la llamada Marcha Negra desde el barrio mártir de El Chorrillo hasta la Asamblea Nacional(parlamento) para reclamar justicia para las víctimas de la invasión norteamericana de 1989. (Tomado de PL)