“Reorganizarnos es una tarea impostergable e imprescindible, con el fin de, en primer lugar, desde las premisas de la autoridad y la admiración conquistada entre nuestros afiliados, potenciar el papel de los artistas, escritores, periodistas e intelectuales y demás personas que laboran en esta importante rama de la economía y los servicios tan estrechamente vinculada al enriquecimiento espiritual de la sociedad, en apoyo a la revolución cubana y a su noble proyecto cultural”.
Así expresó Katia Rodríguez Ramos, secretaria general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Cultura, en las palabras centrales del acto por el Día del trabajador del sector, efectuado este 14 de diciembre en los jardines del Ministerio de Cultura (Mincult), con la presencia de Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del buró político del Partido y Secretario General de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC); Rogelio Polanco, jefe del departamento político ideológico del Comité Central del Partido, y Alpidio Alonso Grau, Ministro de Cultura, entre otros dirigentes del Partido, la CTC y el Mincult.
La dirigente sindical destacó la significación de esta fecha en recordación del mártir Raúl Gómez García, Poeta de la Generación del Centenario, nacido el 14 de diciembre de 1928, “efeméride que conmemoramos dijo— en complejas circunstancias socio políticas e ideológicas que sitúan al sector en el centro de la batalla por la soberanía, la independencia y la salvaguarda de las conquistas del socialismo, como dijera nuestro poeta. Ya estamos en combate, una orden dada y vigente en estos tiempos.
La Jornada por el Día del Trabajador de la Cultura comenzó el pasado 8 de octubre bajo el lema de Te doy mi corazón… porque la Cultura es amor, y concluirá el 8 de enero de 2022, en homenaje a la entrada triunfal en La Habana, procedente de Santiago de Cuba, de la Caravana de la Libertad, que en un día como este del año 59 encabezó el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
Durante su intervención, con evidentes matices críticos sobre el trabajo realizado por el SNTC, enfatizó que esta organización está inmersa en una “gran batalla inspirada en el legado de Lázaro Peña, el legendario Capitán de la Clase Obrera, en cuya memoria, y en correspondencia también con el estilo de la Central fundada por él, trabajamos por ganar mayor prestigio y reconocimiento entre nuestros afiliados, tarea que exige un significativo liderazgo.
“Actuamos —agregó— inspirados en el ejemplo del más fiel y extraordinario promotor del desarrollo de la Cultura cubana, el invicto comandante en jefe Fidel Castro Ruz, quien, en su gran imaginario intelectual y revolucionario, desde los momentos posteriores al triunfo de la revolución, estableció los fundamentales preceptos que sustentan la esencia de nuestro modelo social, el cual potencia la historia y el pensamiento, de que la cultura es lo primero que hay de salvar”.
Durante el acto, un grupo de nueve trabajadores de la cultura, entre ellos destacadas figuras del libro, el cine, las artes escénicas y la música recibieron de manos de Ulises Guilarte y Alpidio Alonso la Orden Juan Marinello que otorga el presidente de la República Miguel Díaz-Canel Bermúdez a propuesta del Mincult, a ciudadanos cubanos o extranjeros por haber realizado una actividad sostenida que constituya una contribución importante a la lucha ideológica de los pueblos y un aporte extraordinario para el desarrollo de la cultura artística literaria y el periodismo.
Seguidamente, el titular de Cultura y Rogelio Polanco impusieron la Medalla Alejo Carpentier, con similares características de adjudicación que la anterior, a 11 destacadas figuras del sector por su notable labor en la creación e interpretación, promoción y organización artística y cultural; en tanto este último, acompañado de Katia Rodríguez, entregaron la Distinción Raúl Gómez García, a igual cantidad de distinguidos trabajadores de la Cultura por su relevante e ininterrumpida labor durante 20 y 25 años, respectivamente.
Por sus resultados en la humana labor de enfrentamiento a la Covid-19, a través de su entrega al arte que cultivan, el SNTC y el Mincult también reconocieron a trabajadores y colectivos que han devenido importante sostén en la batalla contra la pandemia, mucho de ellos con creaciones de temas musicales, documentales, dramáticos, poemas y narraciones orales, que a través de las redes sociales y la televisión y la radio llevaron un halo de aliento al pueblo.
De igual forma, recibieron estímulos varios creadores que se han destacado en el enfrentamiento a la campaña contrarrevolucionaria y contra el sector de la cultura, que junto al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el gobierno de Estados Unidos, pretende desestabilizar al gobierno que hoy preside el compañero Miguel Díaz Canel.
En nombres de los artistas, intelectuales y trabajadores de la cultura, habló Rubén Darío, Premio Nacional de Teatro 2020, quien se refirió al trabajo realizado por numerosos creadores cubanos que supieron reinventarse para continuar su obra en medio de las condiciones de aislamiento impuestas por la propagación del Nuevo Coronavirus, para lo cual buscaron espacios que llegaran a los diversos públicos; en tanto enfatizó la necesidad de potenciar la belleza de la vida en las creaciones y denunciar lo que no está bien.
El cierre de la celebración fue de altos quilates con la emblemática agrupación de música tradicional cubana Septeto Habanero, que desde su surgimiento en el año 1920 se ha destacado por su sonoridad y elegante imagen escénica.