La unidad empresarial de base (UEB) Fábrica La Conchita cumplió su plan de producción para el año 2021, pactado en 5 mil 915 toneladas (t), cifra alcanzada justamente un mes antes de finalizar el año y que les permitió ventas por más de 180 millones de pesos.
Diversificar los surtidos es un propósito hacia el que encamina esfuerzos esta envejecida fábrica, con tecnología obsoleta, pero donde apuestan por el uso de la experiencia de los trabajadores con más conocimiento del proceso y, por ende, pericia.
Así lo destacó Idalberto Rodríguez Herrera, director de la entidad, quien explicó que por primera vez en este 2021 procesaron maíz, laboran en la recuperación de la línea de la piña y fortalecen vínculos con los campesinos para incrementar los volúmenes de guayaba, actualmente en el orden de las 350 o 400 t y que esperan elevar a 800 en el 2022.
Para estimular el cultivo de dicha fruta pagarán un componente en moneda libremente convertible (MLC), lo que permitirá a los productores la sostenibilidad de las plantaciones.
Estas iniciativas son parte del sustento de los resultados de la fábrica, ya que en renglones como frutabomba y mango no recibieron los volúmenes contratados con el sistema de la Agricultura en el territorio.
Otras producciones que esperan revitalizar son el coco rallado y el pepino encurtido, en este último ya incursionaron durante el 2020, pero quedan potencialidades por explotar.
A juicio del director de la entidad, de las 43 medidas aprobadas para el sector empresarial y las 63 para el agropecuario, la que les permite accionar más directamente sobre las finanzas de la entidad es la referida a las ventas minoristas, por lo que ya habilitaron un punto para el expendio de sus surtidos a la población y esperan multiplicar esta experiencia.
En días de frecuentes interrupciones eléctricas permanecían en el centro hasta que se restableciera el servicio y corrían el horario de trabajo para no dañar el flujo productivo.
Cumplieron sus compromisos con los distintos destinos, y es una de las entidades que sustituyen importaciones para el turismo, a la vez que exportan, tanto dentro como fuera de fronteras. Continuar con el mejoramiento tecnológico y la diversificación de sus ofertas es el reto permanente para el colectivo.