El Milan asaltó este sábado el liderato de la Serie A, al menos por unas horas (juega el Nápoles a las 20.45 contra el Atalanta) al vencer por 2-0 al Salernitana en San Siro. El Nápoles deberá ganar al Atalanta para recuperar la primera plaza.
Ni fue necesario tirar del sueco Zlatan Ibrahimovic, quien estuvo en el banquillo los noventa minutos, pues los goles del marfileño Frank Kessié y del belga Alexis Saelemaekers en los primeros veinte minutos fueron suficientes para dejar encarrilados los tres puntos.
Tuvo una enorme cantidad de opciones para ampliar distancias el Milan, la más clara para el español Brahim Díaz, pero las perdonó ante un Salernitana en el que el francés Frank Ribéry apenas pudo aparecer.
Las únicas noticias negativas fueron las lesiones de Pietro Pellegri, delantero que empezó como titular, y del argelino Ismael Bennacer, que acabó tocado.
Los milanistas, que dedicaron sus goles al danés Simon Kjaer tras la lesión de cruzado que puso fin a su temporada, se hicieron con un punto de ventaja sobre el Nápoles, que en plena emergencia por una larga serie de lesionados recibirá a un Atalanta en gran estado de forma.