Paulo Dybala volvió a demostrar que, si las lesiones le respetan, es el futbolista más desequilibrante de esta alicaída Juventus, que llegaba al Estadio Arechi habiendo encadenado dos derrotas consecutivas ante Chelsea, en Champions, y Atalanta. Un gol y genial un pase filtrado de la ‘Joya’, que acabó embocando Morata asistido por Bernardeschi, le bastaron a la ‘Vecchia Signora’ para imponerse a la Salernitana a domicilio, algo que no había logrado jamás en Serie A.
Massimiliano Allegri realizó hasta seis modificaciones respecto al KO liguero del pasado sábado, entre ellas la de Moise Kean por Morata en punta. El ex Everton y PSG completó una tímida actuación, siendo Dybala y Kulusevski los más inspirados en la parcela ofensiva juventina durante el primer acto.
Precisamente de sus botas nació el primer tanto ‘bianconero’. El de Laguna Larga y el sueco tiraron una pared en la frontal del área local que Dybala, quién lo había intentado hasta en tres ocasiones previamente, envió al fondo de las mallas con una fantástica definición, casi cayéndose al suelo.
Gol anulado a Chiellini
El cuarto gol del argentino en esta Serie A le dio alas a la Juve, que hizo subir el 0-2 al marcador tras una falta botada por Cuadrado que sacaron entre el palo y Belec y que Chiellini solo tuvo que empujar a gol. Pero Francesco Fourneau, a instancias del VAR, invalidó el tanto del veterano central por un fuera de juego milimétrico de Kean.
Morata marca a los 3′
La salida del colista tras el descanso fue animosa y en el 57’ rozó el empate con un remate de Ranieri que, solo en el segundo palo, mandó el esférico al poste izquierdo de la portería de Szczesny. Y cuando más sufría la Juventus, volvió a aparecer Dybala para romper la defensa de la Salernitana con un envío tremendo a la espalda de Zortea que recogió Bernardeschi y coló entre las piernas de Belec un Morata que había ingresado en el terreno de juego 3’ antes de lograr su quinto gol del curso.
Con el tiempo ya cumplido, un claro penalti de Gyomber sobre Morata pudo suponer el tercero de la Juve, pero Dybala se resbaló al más puro estilo David Beckham en la Euro 2004 y mandó su lanzamiento al cielo de Salerno.
