Consolidar las empresas agroindustriales azucareras en el entorno de los municipios, mediante el vínculo con los productores y las comunidades y superar lo alcanzado en la atención al hombre constituye un nuevo reto para el sector, que enfrenta la zafra 2021-2022 con un cambio de estructura que la antecede en solo tres meses.
Es esta una de las principales conclusiones del Pleno del Comité Nacional del Sindicato de Trabajadores Azucarero (SNTA) realizado esta semana mediante videoconferencia, y donde quedó ratificado que el problema esencial de esta campaña es el déficit de caña, el cual se arrastra desde hace varias décadas y habrá que darle solución en aras de cumplir con los Lineamientos del 8vo. Congreso del Partido.
Las dos encomiendas a los azucareros atañen a la recuperación cañera e industrial fortaleciendo el encadenamiento con la industria nacional, las entidades de ciencia para que las inversiones repercutan en las exportaciones.
El informe presentado al pleno consigna que al cierre del primer mes de trabajo de las empresas agroindustriales, el Grupo Azucarero logró ventas por el 74 % de lo planificado, y que de las 57 nuevas entidades creadas sólo 5 tienen utilidades, mientras cuatro de las nacionales incurren en pérdidas.
William Licourt González, secretario general del SNTA instó a los miembros del Comité Nacional a analizar críticamente los aspectos relacionados con el accionar del sindicato en el cumplimiento de las 63 medidas aprobadas para potenciar la producción de alimentos y en el fortalecimiento del funcionamiento de la estructuras de base.
Las intervenciones de los presidentes de las unidades básicas de producción cooperativa (UBPC) El Entronque, de Camagüey y Guabiniyón 4, de Las Tunas sostienen que es factible sembrar más caña y elevar los rendimientos aún en las difíciles condiciones económicas que enfrenta el país, la falta de insumos, los eventos climatológicos, además de producir alimentos para el pueblo.
Para ello es preciso que cada quien haga lo que le corresponde y se le brinden las condiciones de trabajo y una remuneración acorde con los resultados.
Dos temas esclarecedores fueron abordados por los directivos del Grupo Azucarero Camilo Hernández y Antonio León Mursulí: el empoderamiento de la base productiva, la consolidación de las empresas agroindustriales y la concatenación de los nuevos actores económicos con el sistema empresarial.
Sergio Rodríguez, funcionario del Comité Central del Partido llamó a resolver los problemas del funcionamiento sindical, la capacitación y a trabajar con la nueva idea de los colectivos laborales.
Refirió la necesidad de la recuperación de la industria, sobre todo ante una zafra corta debido a la falta de caña, a sumar a organismos con la Asociación de Técnicos Azucareros (ATAC) y la de Pequeños Agricultores (ANAP) para lograr el aseguramiento político y la implementación de casi un centenar de medidas para la transformación del sector.
“El momento demanda mayor organización y la participación activa de los trabajadores en el quehacer de la zafra; hay que despojar la asamblea de afiliados de formalismos, no llevar excesos de números que no se entienden sino respuestas a las preocupaciones de los afiliados”, dijo Neala Santana, jefa del Departamento de Organización de la Central de Trabajadores de Cuba, al concluir el pleno.
