Doña Marta Abreu de Estévez cumpliría hoy 176 años. Es conocida por su labor benefactora y también patriota.
Santa Clara le debe su hidalguía, su pensamiento ágil, avanzado y su amor por la Villa. Instituyó en su terruño lavaderos, escuelas para niños pobres, asilo de ancianos, dispensario médico, la introducción de los adelantos de la ciencia de aquellos momentos como un observatorio meteorológico, la planta eléctrica, el ferrocarril. También rifó máquinas de coser para propiciar empleo a las mujeres pobres , daba propinas, incluso propició la creación de esposas para los presos con el fin de que no les dañaban la piel al ser trasladados, construcción de puentes…
Su obra excepcional el teatro La Caridad, joya arquitectónica, que lleva ese nombre porque lo que se recaudaba en sus funciones era destinado a hacer el bien y sustentar las acciones benéficas.
La gran patriota
Fermín Valdés Domínguez consideró que su “excelsa virtud” fue su desinteresada contribución a la causa de la independencia de Cuba. Máximo Gómez la ubicó en el lugar exacto para la historia de la Patria al expresar:
“No saben ustedes los villaclareños, los cubanos todos, cual es el verdadero valor de esa señora. Si se sometiera a una deliberación en el Ejército Libertador el grado que a dama tan generosa habría de corresponder, yo me atrevo a afirmar que no hubiera sido difícil, se le asignaría el mismo grado que yo ostento: Generalísima”.
Ella y su hijo con los seudónimos de Ignacio y Jimaguayú, respectivamente, encabezaron la lista de donantes a la Guerra Necesaria con más de 800 mil pesos oro. Marta y su esposo Luis Estévez, estando fuera de Cuba estaban informados de los sucesos independentistas, costearon pasajes y hospedajes para combatientes, enviaron al campo insurrecto municiones, rifles, medicamentos, instrumental quirúrgico…
Ante la noticia de la muerte de Antonio Maceo envió una misiva de dolor y aliento a la dirección del Partido Revolucionario Cubano que radicaba en Nueva York donde afirmó: “Ante golpe tan doloroso y en horas como estas no podemos desfallecer, adelante, pongo a disposición 10 mil pesos”. Diez mil pesos significaban entonces 10 mil rifles para enfrentar al colonialismo español.
Los esposos consideraron un deber regresar de París para ver hondear sola en El Morro la bandera cubana. Ella apoyó a su esposo a renunciar al cargo de vicepresidente de la República ante el entreguismo de Don Tomás Estrada Palma.
Se le recuerda hoy
Santa Clara la recuerda en el 176 aniversario de su natalicio . Su ejemplo altruista sigue intacto y venerado. Se le rinde tributo con una ofrenda floral en su monumento en el parque Leoncio Vidal.
En la Universidad Central, institución que lleva su nombre, se le recordó con emotivo acto solemne. Las profesoras Isabel Díaz de la Torre y Arnelice Álvarez Morera en el espacio que desarrollan cada 13 de mes :» Homenaje a Marta Abreu desde las Artes «, se presentarán en esta ocasión a estudiantes y profesores de música interpretando piezas de concierto y populares cubanas.