Un millón seiscientos cuarenta y cuatro mil novecientos veinticuatro paquetes enviados desde el extranjero, con destino a personas naturales, han llegado a su destino final tras 43 días de iniciarse por la dirección del país un estricto y sistemático seguimiento sobre cómo funcionan las seis empresas responsabilizadas con la recepción y distribución de esas cargas a su arribo al territorio nacional.
Con anterioridad, apenas unos dos millones de bultos se distribuían como promedio anualmente por parte de dichas empresas —también conocidas por transitarias— de las grandes cifras que se acumulaban en diferentes almacenes. Esa realidad llevó a la búsqueda de soluciones para los problemas que impedían ofrecer respuestas más agiles a los clientes.
Los números de entrega en las últimas jornadas ciertamente hablan de cuánto esfuerzo se ha hecho para «poner al día» esas cuestiones. No obstante, no pueden convertirse en motivo para la complacencia con lo realizado.
Este es el momento de avanzar a otra etapa, en la cual se perfeccione y fortalezca el sistema de trabajo que se ha ido implementando y nos permita que la actividad se desarrolle adecuadamente, consideró el miembro del Buró Político del Partido y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, al encabezar este jueves, desde el Palacio de la Revolución, la reunión que ya se ha hecho habitual en las últimas semanas con representantes de esas empresas cubanas.
Cada semana siguen enviándose bultos, enfatizó, y tenemos que ser capaces —una vez lograda la estabilidad en la entrega—, de continuar evaluando todas aquellas cuestiones que permitan perfeccionar los mecanismos de trabajo, para que se beneficien tanto los clientes, como las propias transitarias.
Se sobreentiende, subrayó, que llegue el momento en que las máximas autoridades a nivel de país o a nivel de provincia no necesiten estar involucradas directamente en estas cuestiones para que funcionen, pero para lograrlo, «hay que resolver los problemas, primero los subjetivos, y luego los objetivos».
Varias cosas se pueden solucionar sin mayores recursos, y una de ellas está muy relacionada con la creación de estructuras —lo mismo en formas de gestión estatal como no estatal— que permitan una redistribución efectiva a lo largo y ancho de la nación, reflexionó Marrero Cruz.
En cada lugar —insistió— se tienen que preparar las condiciones para ir resolviendo los problemas que se han convertido en un «cuello de botella» por temas logísticos, de capacidad de almacenes, de equipamiento y otros. Todo eso hay que preverlo y ponerlo en los planes de inversiones en la medida de las posibilidades, destacó.
Al actualizar acerca de los paquetes pendientes de distribución con más de 30 días en alguna de las transitarias, el Ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, dijo que hasta el 2 de noviembre de contabilizaban 8 456 bultos, pertenecientes a 4 247 personas.
Entre las principales causas que han imposibilitado su entrega —analizadas en destalle durante la reunión— se refirió fundamentalmente a problemáticas con los documentos que impiden contactar con el destinatario. De manera particular señaló otras cuestiones como receptores de bultos que se encuentran en el exterior o han fallecido, datos ilegibles del envío y otros.
Como parte del proceso de reorganización que se lleva a cabo, el Ministro de Transporte aseguró que se continúan las acciones para que estos paquetes lleguen a su destino final. Cada uno de ellos, acotó, será atendido hasta el momento de su entrega, devolución o declaración de abandono, en dependencia de la situación en que se encuentren.
Asociado a este tema en particular, el Primer Ministro enfatizó en la necesidad de trabajar para eliminar todas las causas que no son imputables a nuestras empresas, lo cual casi siempre es posible resolver haciendo buenos contratos con las agencias foráneas que intervienen en el envío de paquetería a Cuba.
En el encuentro —donde también se encontraban los viceprimeros ministros Jorge Luis Tapia Fonseca y Jorge Luis Perdomo Di-Lella—, Marrero Cruz reflexionó sobre diversas cuestiones que deben analizarse con mayor profundidad a partir de este momento, como el perfeccionamiento de las medidas asociadas a la distribución; el fortalecimiento de las transitarias existentes y la creación de otras para llevar los servicios a todas las provincias; la definición de dónde es necesario ampliar capacidades para que la recepción y tramitación sea más ágil; así como el diseño de programas informáticos para dar seguimiento a los bultos y de sistemas de comunicación que permitan a los clientes hacer llegar también sus inquietudes.
A partir de estas y otras acciones que se ponen en práctica, dijo, se trabaja en una propuesta de política para fortalecer la actividad en el país. Avanzar en el esclarecimiento de todas esas cuestiones nos permitirá —consideró Marrero Cruz— lograr niveles de organización y eficiencia que posibiliten la llegada de todos los paquetes, en el tiempo establecido, a sus destinatarios finales.
(Tomado de Presidencia Cuba)
Me parece que ae han olvidado de la paqueteria nacional.
Llevo esperando 2 meses por un bulto desde Matanzas, algo inconcebible,RR001657796CU,ese es el código del envio.