Nuestro eslogan de que la ANIR salva es una realidad, porque con las ideas y soluciones por parte de sus miembros, son más eficientes las producciones en la avicultura, expresó la Doctora en Medicina Veterinaria Odalys Martín Hernández, presidenta del Comité de Innovadores y Racionalizadores (CIR), en la Empresa Avícola de Ciego de Ávila.
¿Cuáles inventivas y autores han aportado más en los últimos tiempos?
«Primero quiero destacar el récord de tres millones de pesos por concepto de efecto económico en el 2019, gracias a una labor sobresaliente de nuestros aniristas, cuyo desempeño se mantiene en la actualidad.
«Uno de los aportes de mejores resultados se materializó en la base de aseguramiento, donde el innovador Noelvis Valenzuela Dulzaide, junto a sus compañeros, fabricó las rejillas para los comederos de las aves en la unidad de las reproductoras pesadas.
«Antes de la realización de ese aditamento el macho consumía también parte del alimento de la gallina y eso provocaba inestabilidad en la producción de los huevos que se utilizan en la vecina planta de incubación, pertenecientes ambas a la Unidad Empresarial de Base Pina II, la cual garantiza los pollitos que se comercializan con varias provincias, ya que nuestra empresa fue una de las seleccionadas para desarrollar el programa nacional del pollo de engorde».
Mencionó también al doctor Jorge Gómez Cuello que atesora una actividad innovadora sostenida y eficiente, quien tiene entre sus relevantes contribuciones los estudios sobre el período de formación de las pollitas destinadas al reemplazo de las gallinas ponedoras, con vistas a lograr aves con altos y estables resultados en la producción de huevos.
Además de dirigir el CIR, ¿es autora de innovaciones?
«Si, logramos introducir como alternativa en la avicultura el uso de los microorganismos eficientes, con los cuales disminuyeron los focos infecciosos que provocaban altas pérdidas de gallinas ponedoras, y crecieron los resultados económicos, principalmente los ingresos por concepto de venta, al producirse más huevos por ave», indicador este último en el que los avicultores avileños alcanzan hace tiempo los mayores dividendos entre los colectivos de su tipo en el país.
Aunque las actuales circunstancias no son favorables para el óptimo desempeño de la avicultura, debido a los efectos de la COVID-19, el bloque económico imperialista y el déficit de alimento animal, los innovadores han contribuido al cumplimiento en lo que va de año del plan de producción de huevos con destino a la alimentación del pueblo en Ciego de Ávila y los envíos hacia La Habana, Santiago de Cuba, Granma, Guantánamo y otros territorios.
«Así vamos por más frutos en la actividad innovadora y el trabajo integral de nuestro centro que en el presente año ratificó la condición de Vanguardia Nacional, otorgada por la CTC», enfatizó la también especialista de la dirección técnica y desarrollo del colectivo avícola avileño.
