Ser más eficientes, productivos y rentables. Aumentar los rendimientos cañeros. Aplicar iniciativas, tanto en la agricultura como en la industria para vencer los obstáculos que enfrenta la producción azucarera. Alcanzar eficiencia progresiva. Utilizar y darles un mayor aprovechamiento a las tecnologías de punta de que disponen. Incrementar los ritmos de siembra…
Esos son algunos desafíos actuales que reclaman el accionar consciente y comprometido de los trabajadores del sector azucarero en Cuba y en Las Tunas, reseñados por Carmen Tamayo Pérez, secretaria general del Buró Provincial del Sindicato de ese importante sector de nuestra economía, que este 13 de octubre celebró su Día.
En el acto conmemorativo de la fecha, que recuerda el momento en que el gobierno revolucionario implementó la ley 890, con la cual nacionalizó 382 grandes empresas cubanas y extranjeras, entre ellas 195 centrales azucareros y 18 destilerías, la dirigente sindical enumeró los retos que enfrentan sus cerca de 13 mil afiliados, inmersos ahora en los preparativos de la venidera zafra por su impacto en la economía nacional.
También enfatizó en el proceso de reordenamiento que ha creado nuevas estructuras en el sistema empresarial –en la provincia fueron constituidas cuatro empresas y un órgano de dirección, coordinación y supervisión, adscripto al Grupo Nacional Azcuba, y en las expectativas que generan estas transformaciones en torno al imprescindible fortalecimiento de la empresa estatal socialista.
Tamayo Pérez remarcó que la reestructuración por sí sola no es garante del cambio que exige la producción azucarera y sus derivados, la consideró como una vía proveedora de mayor autonomía y facultades que hacen más atractivo el quehacer de un sector que es historia y tradición en Cuba y conserva su impacto en el desarrollo económico del país, “pero a ello hay que ponerle corazón, porque de lo que hagamos de ahora en lo adelante dependerá, también, el futuro de la familia azucarera”.
La celebración estuvo matizada, además, con la entrega de la medalla Jesús Menéndez a tres trabajadores con relevantes méritos laborales en el ramo y la distinción Jesús Suárez Gayol a otros seis afiliados con labor ininterrumpida durante más de 20 años en faenas de la agricultura y la industria azucarera.
También fueron reconocidos varios trabajadores por sus destacados aportes a la batalla que libra la provincia por la vida y la salud del pueblo frente a la amenaza que significa la pandemia que enluta al mundo.
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