Por Enrique Moreno Gimeranez
El diputado al Parlamento Europeo, Giorgos Georgiou, ratificó su solidaridad con Cuba frente al recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por el Gobierno de Estados Unidos.
En entrevista exclusiva, el eurodiputado chipriota denunció que «el bloqueo se ha hecho más severo, e incluso más inhumano, durante la pandemia, privando deliberadamente al pueblo cubano del acceso a los suministros necesarios para enfrentar este virus». A su vez, reconoció los logros de nuestro país en materia de prevención y enfrentamiento a la COVID-19 y su contribución internacionalista hacia otros pueblos del mundo en esta batalla por la vida.
–Durante más de seis décadas, el pueblo de Cuba ha sufrido la imposición del bloqueo económico, comercial y financiero por parte del Gobierno de Estados Unidos, que se ha recrudecido en tiempos de la COVID-19. ¿Cuál es su posición sobre este tema?
–Como diputado al Parlamento Europeo y como integrante del Partido Progresista del Pueblo Trabajador (AKEL) denunciamos el bloqueo ilegal de Estados Unidos contra Cuba, que se agrava constantemente y que ha continuado sin cesar a pesar de la pandemia, y reiteramos nuestra solidaridad con el Partido, el Gobierno y pueblo cubanos.
«A nivel europeo, nuestro Grupo político GUE/NGL también actúa en la promoción de la causa del pueblo cubano exponiendo y denunciando las graves consecuencias –territoriales y extraterritoriales– del bloqueo, así como de la política agresiva de la administración estadounidense contra Cuba, y exigiendo su fin.
«Cuba tiene una orgullosa historia de resistencia al imperialismo y los intentos de Estados Unidos no han logrado quebrantar la dignidad y soberanía del pueblo cubano. Todos debemos aprender de las lecciones de resistencia del pueblo cubano, de su determinación en la lucha contra el intervencionismo y las políticas injerencistas estadounidenses, y en la defensa del derecho soberano a decidir su propio destino.
«El bloqueo se ha hecho más severo, e incluso más inhumano, durante la pandemia, privando deliberadamente al pueblo cubano del acceso a los suministros necesarios para enfrentar este virus. Quienes exigen una “intervención humanitaria” deliberadamente subestiman el hecho de que, en las condiciones particularmente duras y adversas creadas por el bloqueo estadounidense, Cuba ha desarrollado vacunas contra la COVID-19, ha garantizado la atención y los servicios de salud para su pueblo, y continúa combatiendo la pandemia por sí sola.
«Además, ha llevado a cabo con éxito misiones humanitarias e internacionalistas admirables en decenas de países de todo el mundo para ayudar en la lucha contra la pandemia, incluso en países de la Unión Europea.
– ¿Cómo valora estas acciones internacionalistas cubanas?
–El hecho innegable del asunto es que Cuba ha sido reconocida durante mucho tiempo por su infraestructura médica y su contribución en la lucha contra las crisis de salud global, con miles de sus médicos trabajando en misiones de salud en todo el mundo. Más que eso, la experiencia cubana de manejo de la pandemia ha demostrado que cuando los recursos limitados se asignan de manera justa y con el enfoque en las personas y la prevención, se pueden lograr resultados que antes se consideraban impensables. Y todo esto en un momento en el que los recortes traumáticos neoliberales impuestos a los sistemas de salud occidentales se derrumbaban como un castillo de naipes ante la pandemia.
–En su opinión, ¿qué importancia tiene el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación suscrito entre Cuba y la Unión Europea para el fortalecimiento de las relaciones de nuestro país con su nación y con el resto de los miembros del bloque?
–Es de suma importancia ya que define que las relaciones entre ambos deben basarse en un diálogo político que promueva la cooperación, la solidaridad y el desarrollo de respuestas conjuntas a los desafíos globales. Dichos desafíos incluyen luchar contra la pandemia de la COVID-19, contribuir a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, fortalecer a las Naciones Unidas como núcleo del sistema multilateral, y reconocer y apoyar el papel estratégico de Cuba en la relación de la UE con la región de América Latina y el Caribe.
– ¿Cómo valora los actuales vínculos interparlamentarios entre su país y Cuba?
–Las relaciones diplomáticas entre Chipre y Cuba tienen más de 60 años de historia. Una historia de sincera amistad basada en la solidaridad y la reciprocidad, que culminó con el establecimiento de la Embajada de Chipre en La Habana en 2009. Los lazos y estrechas relaciones entre los dos países deben seguir profundizándose, tanto en el contexto político, económico y cultural para el bienestar de nuestros pueblos.
– ¿Qué mensaje envía al pueblo cubano?
–Quisiera extender y reiterar mi total apoyo y solidaridad con el combativo pueblo de Cuba, que desde hace seis décadas padece la criminal imposición del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos.
«Cuba siempre ha sido uno de los partidarios más honestos y confiables de la lucha del pueblo chipriota por el fin de la ocupación y reunificación de Chipre y su pueblo. Me gustaría agradecerles su solidaridad y prometer que siempre intentaré exponer y abogaré por poner fin a las intervenciones y maquinaciones en curso contra Cuba».
