Pero escogió irse, porque con el agravamiento de la pandemia de Covid-19 a nivel mundial estuvo sin ver a sus seres queridos 11 meses durante 2020 y ocho en este año.
‘La Covid-19 lo cambió todo (…) Al principio parecía bien, pero luego se volvió terrible. La cuarentena y el mecanismo de burbuja me alejaron de mi familia’, explicó.
Por otro lado, Cannavaro mencionó la introducción de nuevas disposiciones en la Súperliga china de fútbol en cuanto a la formación de talentos y cuestiones financieras.
Si bien entiende la necesidad de elevar el nivel de los deportistas nacionales, consideró complicado cumplir con la orientación de enviar al campo más jugadores jóvenes, sin tener todavía la suficiente preparación para topes profesionales.
También se refirió a un descenso en el desarrollo de la disciplina y la salida de importantes figuras como los brasileños Paulinho y Talisca, después de adoptarse el tope a los salarios.
China restringió la paga de los atletas locales a 1,4 millones de dólares y a 3,3 millones la de los foráneos.
Además, cada club de la Súperliga podrá gastar un máximo de 157 millones de dólares al año y de ese monto destinar el 60 por ciento a los sueldos.
Pero a juicio de Cannavaro, el campeonato chino necesita de atletas como Paulinho y Talisca para dar buenos ejemplos e incentivar a los nacionales a prepararse mejor.
‘Cuando un jugador estrella se une a la Súperliga por un salario mejor, enseña a los otros cómo entrenar, jugar y alimentarse de mejor manera. Los jóvenes pueden aprender mucho y trabajar duro para llegar a ser como ellos’, acotó al augurar un posible retroceso en la lid del gigante asiático con la renuncia de algunos extranjeros.
En su caso, reveló que cedió 15 meses de sueldo y bonos (equivalentes a más de 24 millones de euros) en pago de impuestos.
La semana pasada se supo que el italiano de 48 años y Balón de Oro en 2006 dejó su puesto en el Guangzhou Evergrande FC, propiedad de la empresa inmobiliaria en riesgo de desaparecer por problemas financieros.
Cannavaro cumplía con su segunda etapa al frente del club chino tras su llegada en noviembre de 2017, dos años después de sustituir a Luiz Felipe Scolari.
Guio a Guangzhou al título en 2019, pero la temporada pasada finalizó segundo.