Ronald Koeman regresa de Lisboa de nuevo en el alambre. El 3-0 contra el Levante se hizo papelillos en Da Luz, porque el Benfica desnudó las carencias del Barça. Individuales, pero también tácticas. Fuentes cercanas a la directiva airearon que no se tomaría una decisión en caliente en la madrugada de este miércoles, pero la situación del técnico holandés es de extrema debilidad.
Laporta y la Junta directiva no creen en él y su crudeza en el discurso con los jugadores tampoco termina de gustar en el club y a algunos miembros del vestuario. «Al final, es lo más fácil», dijo Sergio Busquets cuando le preguntaron si la solución era un cambio de entrenador. Por supuesto, la frase escondía un tipo de reflexión diferente a su literalidad: «Los jugadores también tenemos una responsabilidad». De Jong también fue contundente. «No es el problema», respondió cuando se le preguntó también por el relevo.
Laporta, mientras, espera. Según Catalunya Ràdio, la carrera de los recambios no se reduce a Xavi y Bob Martínez. A Laporta le gusta Andrea Pirlo pese a que el ex entrenador de la Juventus debutó en los banquillos con una mala experiencia.
RAC-1 añade a Gallardo
Además, según RAC-1, Marcelo Gallardo es otro de los nombres que maneja Joan Laporta para sustituir a Ronald Koeman. Actual entrenador de River Plate, sería otro de los tapados junto a Andrea Pirlo. El futuro de Koeman sigue en el alambre, pero la directiva no tiene claro si destituirlo de manera fulminante, esperar al final del partido del Wanda donde no podrá sentarse en el banquillo, o alargar la agonía si hay un buen resultado contra el Atlético. Los síntomas de agotamiento del holandés y cierto distanciamiento del vestuario en su discurso convierten la situación en prácticamente irreconducible.