Un proceso de restructuración emprendió el Grupo Azucarero AzCuba, este mes de septiembre, que debe impactar positivamente en las producciones cañera-azucarera, agropecuaria, de derivados y en el mejoramiento de condiciones en las comunidades.
Las 57 empresas agroindustriales nacen con la actualización de mandatos y facultades otorgados al sistema empresarial, que distingue la autonomía de gestión, y reflejarán mejor organización de los procesos productivos y fabriles, eficiencia financiera y económica, ahorro y uso racional de los recursos.
Los resultados de este cambio estructural, que fortalece a un sector urgido de responder a las necesidades nacionales, se harán visibles en la zafra 2021-2022, esencialmente en la siembra y cosecha de la caña de azúcar, base de todas las producciones de AzCuba.
William Licourt González, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Azucareros (SNTA), aseguró a Trabajadores que, entre los principales retos están el crecimiento de los rendimientos agrícolas, la fabricación de azúcar y derivados y hacer efectivos los encadenamientos con la economía local y los polos productivos.
Igualmente será decisiva, expresó, la vinculación con la base productiva, con un enfoque creativo y diferente que propicien mayor uso de la tierra, explotar las áreas vacías y la bonificación por la venta de la caña y demás renglones.
El dirigente sindical insistió en la importancia de motivar a los trabajadores y colectivos, elevar la productividad, la consagración, disciplina, sentido de pertenencia y laboriosidad con el objetivo supremo de promover producciones que son historia y continuidad de la nacionalidad cubana.
Licourt González comentó que al sindicato corresponde contribuir a la integración de los factores, la representación de los trabajadores, e impulsar la estrategia socioeconómica de cada empresa.
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