El PSG parace no conformarse con sus galácticos y, según informa L’Equipe, está buscando reforzar la media cancha y por ello está muy atento a Paul Pogba y Eduardo Camavinga.
Entre los dos, se antoja más probable que, en caso de darse una llegada este verano, sea la de Camavinga y no la de Pogba. El prometedor centrocampista del Rennes finaliza contrato en junio de 2022, y en el cuadro bretón son conscientes que prolongar dicho vínculo es una misión imposible, por lo que, para sacar tajada y que no se marche libre el año que viene, escucharían ofertas ya por unos 30 millones de euros, lejos de los 100 ‘kilos’ que pedían hace unos meses.
(Con información de Mundo Deportivo)