En la tarde de este viernes 30 de julio el presidente estadounidense Joe Biden sostuvo un encuentro con políticos y activistas proyanquis. El hecho es parte de la respuesta de su Gobierno a la supuesta “revuelta” del pasado 11 de julio en Cuba.
Esa tarde nada quedó al azar, como es habitual en las actividades organizadas desde la Casa Blanca. En la lista de invitados no figuraba, por ejemplo, ninguno de los senadores que ha reclamado el fin del bloqueo a Cuba, ni representantes de la sociedad civil estadounidense como el profesor cubano estadounidense Carlos Lazo, veterano de la guerra de Irak y quien voluntariamente hizo campaña a favor del partido Demócrata en las elecciones que dieron la victoria a Biden, Su propuesta de construir puentes de amor entre las dos naciones no es la opción que interesa al imperio ahora.
Biden, quien fuera vicepresidente cuando Barack Obama optó por el cambio de política con Cuba, ha decidido dar un golpe de timón y ha preferido escuchar las voces de los “anexionistas cubanos” para, como explicó el canciller Bruno Rodríguez Parrilla en un tuit, “justificar su operación de cambio de régimen contra Cuba. Al gobierno de EEUU solo le interesa maquinaria electoral Florida, mientras ignora reclamo del pueblo cubano, de sus electores cubanos y estadounidenses y del mundo”.ç
Entre los invitados de ocasión destacan Manny Díaz, ex alcalde de Miami y director del Partido Demócrata en Florida; Emilio Estefan, productor musical radicado en Miami; Felice Gorordo, empresario y consejero delegado de eMerge Américas; Ana Sofía Peláez, cofundadora de la organización Miami Freedom Project; y el músico Yotuel Romero.
Precisamente sobre el cuestionable activismo político de este último, el internauta cubano Félix López reflexionó en un post de Facebook que Trabajadores comparte a continuación, tomado del Facebook de Efe Lo (31 de julio del 2021):
“A veces la desvergüenza y la maldad se visitan y posan juntas para la mentira. Pero la hemeroteca, implacable, se encargará de desmontar la farsa.
En esta foto, Bob Menéndez (senador demócrata cubano-americano) sonríe, mientras Yotuel (ex Orisha) hace la L de libertad.
En la siguiente imagen, el presidente Bill Clinton firma la Ley Helms-Burton. A su lado, orgulloso, está Bob Menéndez, redactor del Capítulo II de lo que sería el apretón de tuerca mortal para la economía y el futuro de Cuba.
El 12 de marzo de 1996, cuando Bob celebró su aporte al «embargo», Yotuel tenía 20 años y cantaba hip hop en un grupo llamado Amenaza. Había nacido el 6 de octubre de 1976, el mismo día en que Luis Posada Carriles (socio y cúmbila del senador Bob Menéndez) hizo estallar en el aire a un avión comercial cubano y asesinó a73 personas. De esa amistad da fe la tercera instantánea (en blanco y negro), donde el terrorista Posada Carriles y Bob Menéndez brindan por alguna de sus «hazañas».
La vida, que está hecha de ritornelos, para decirlo en un concepto musical que debe entender Yotuel, hace que las cosas a fines se encuentren, se unan y celebren”.
