Al recibir comentarios digitales en relación con los nuevos protocolos a los cuales se hace referencia en Cuba actualiza protocolo para diagnóstico y manejo clínico de confirmados, sospechosos y contactos consideramos oportuno traer a bordo de esta guagua, los aspectos en los que existen más dudas y confusiones.
Ya está vigente la actualización del protocolo para el diagnóstico y el manejo clínico de pacientes confirmados, sospechosos y contactos de quienes han resultado positivos a la COVID-19.
Esas nuevas medidas, explican:
están en correspondencia con la transmisión del virus; la actual situación epidemiológica de todas las provincias; la necesidad de seguir optimizando el uso de los recursos, sobre todo de las camas.
También se tiene en cuenta:
el avance de la vacunación en la que se ha aplicado la tercera dosis de alguno de sus candidatos vacunales a más de dos millones de personas.
Este protocolo actualizado persigue el objetivo de evitar que la persona se contagien, pero si ya está enferma, que no evolucione hacia estadios graves de la enfermedad y si ello ocurre, pues que sobreviva y se recupere.
En concreto, los puntos que resaltamos son:
Si una persona que presenta síntomas de la enfermedad resulta positivo al test de antígeno, de inmediato se le realiza un PCR y, sin esperar su confirmación, se inicia la conducta terapéutica correspondiente.
Los contactos de casos confirmados se aíslan en el domicilio14 días bajo vigilancia clínico-epidemiológica a fin de poder detectar la aparición de síntomas.
Como parte del chequeo en frontera, a los viajeros que entren al país se les aplica un testo de antígeno que en caso de ser positivo, se confirma mediante PCR. Y antes de concluir la cuarentena serán estudiados con muestras PCR.
Quienes continúen siendo positivos a la COVID-19 por 14 días o más, si están bien clínicamente, serán dados de alta con seguimiento en el hogar, pues tras 14 días de haber sido confirmados es muy bajo el riesgo de transmisión de la enfermedad.
Los pacientes confirmados y definidos como de bajo riesgo, tanto asintomáticos como sintomáticos leves, serán ingresados en su domicilio.
Al ingreso en instituciones irán los positivos de bajo riesgo que presentan síntomas moderados, así como los de mediano y alto riesgo que manifiesten síntomas leves o moderados.
Con especial énfasis, se indica:
Bajo ningún concepto podrán ser ingresados en el hogar pacientes cuya vivienda no reúna condiciones para el cumplimiento de las medidas de aislamiento y tratamiento; a quienes la distancia y el acceso al consultorio no permita darles un seguimiento diario a su evolución médica; y quienes formen parte de familias disfuncionales.
Tampoco podrán quedar en ingreso domiciliario menores de 12 años, embarazadas y puérperas; niños de 12 a 18 años con patologías crónicas asociadas; y pacientes con enfermedades crónicas descompensadas o en condiciones clínicas que pudieran llevarlos a la gravedad.
En resumen: Independientemente de la información brindada al personal de salud sobre el nuevo protocolo para diagnóstico y manejo clínico de confirmados, sospechosos y contactos, en esta versión es más importante que nunca que toda la población lo conozca, pues importantes medidas introducidas en su actualización requieren de la participación consciente de cada individuo.
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