Tokio.- Aunque reconoce que no le gusta competir en el continente asiático ni australiano por la diferencia de hora y el calor excesivo, Arlenis Sierra, nuestra mejor ciclista del último lustro, ya está en esta ciudad para participar en la ruta (f) de los XXXII Juegos, Olímpicos, el próximo 25, “en la cual quiero quedar satisfecha conmigo misma”.
Consciente de que no le gusta dar pronóstico antes de ninguna carrera, Arlenis explicó que “será muy duro el trazado de 130 kilómetros para las 67 mujeres que estamos inscritas puesto que además del ascenso de más de 40 kilómetros hay un desnivel acumulado de 2600 metros”.
Este desnivel se refiere a los vaivenes o columpios del segmento, que resulta ya impresionante, “porque lo más que he corrido es con desniveles entre 2000 y 2100. No obstante, el primer objetivo es terminar la carrera y el segundo mejorar el escaño de Río”.
Sin adelantar mucho la posible táctica de carrera a emplear explicó que competir en solitario es doblemente difícil en la ruta, al tiempo que señaló a las formaciones de Holanda e Italia como los más fuertes. “No debo ser yo quien ataque ni responda ante cada señal de ellas, pues podrían desgastarme y no terminar. Debo ser precisa a la hora de salir del pelotón”.
¿Te sientes en forma deportiva óptima para estos Juegos?, le indago en sprint intermedio. “Me gustaría haber podido concluir el Giro de Italia, pero tuve una caída e hice el entrenamiento que tocaba. Sin duda, esos kilómetros a ese nivel siempre benefician.
“Estar en un club profesional me da mucho nivel porque conozco a varios atletas con quienes he corrido carreras en otras muchas ocasiones y vas conociendo el ritmo este nivel. Conocer la forma que se corre. No es lo mismo cuando te enfrentas a lo desconocido”.
Toca el turno a lo que pudiera pasar con Arlenis después de Tokio y la determinación parece clara para Arlenis. “Todavía no sé. Quisiera ser madre y tener mi familia. El deporte no está por delante de mi vida personal. Quiero tener dos hijos. Estoy seguro que esa motivación es igual o mayor que ganar una medalla olímpica”.
De cualquier manera, lo más importante es que la carismática deportista anda con ideas claras a solo horas de rodarse la ruta olímpica. “Si en Río me arrepentí de no haber contado con la bicicleta adecuada y logré el 28, ahora con la bicicleta ideal tiene que salir un mejor resultado”.