Al reto de contener la complejidad epidemiológica del territorio, justo cuanto Sancti Spíritus reporta el mayor número de personas con COVID-19 desde el inicio de la pandemia, se suman las acciones para minimizar las posibles afectaciones que pudiera provocar el huracán Elsa sobre la geografía espirituana.
De forma temprana, las máximas autoridades de la provincia orientaron medidas que son ejecutadas con inmediatez para preservar la vida, así como los bienes personales y económicos, ante el azote de los vientos y las lluvias asociados al fenómeno meteorológico.
El mayor desafío se concentra en rediseñar la evacuación de personas, principalmente los residentes en el litoral sur y aguas abajo de la presa Zaza, que habitualmente eran resguardados en muchas de las instituciones que, en la actualidad, funcionan como centros de aislamientos para sospechosos o positivos al SARS7- CoV-2.
En ese sentido se orientó habilitar otros locales para una evacuación breve y operativa, con la participación de los evacuados que deberán portar objetos de uso personal como vasos, cubiertos, platos, colchas, medicamentos, nasobucos y lociones desinfectantes.
En los ocho municipios espirituanos se labora en el resguardo de los recursos económicos, en la recogida de alimentos en el pico de cosecha, el traslado de la masa ganadera a lugares seguros, y el expendio de recursos básicos a la población.
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