Mucho antes de decretarse la fase informativa (a partir de las 13:00 horas de este viernes 2 de julio) santiagueras y santiagueros desarrollaban acciones diversas para reducir los riesgos que implica el inminente paso del huracán Elsa por las cercanías de este suroriental territorio.
Tanto instituciones estatales como el sector residencial concretaban, desde las primeras horas de la mañana, tareas diversas encaminadas a visibilizar vulnerabilidades y minimizarlas en función de preservar los recursos materiales y en especial la vida humana.
En la agricultura, por ejemplo, se aseguran en unos 65 almacenes surtidos como el carbón vegetal y productos químicos, más de 11 mil cabezas de ganado habían sido llevadas a lugares altos, de aproximadamente 64 mil previstas a proteger, y se agilizaban las cosechas en áreas de posible inundación, principalmente de maíz y yuca.
Según precisó a Trabajadores Adriana López Cardona, subdelegada general del Ministerio de la Agricultura en la provincia, unas 2 mil colmenas fueron puestas a buen resguardo, la mayoría de ellas en los municipios de Guamá, Segundo y Tercer Frente.
La directiva precisó que unas 400 toneladas de café procesadas en la industria Rolando Ayud, del municipio de Contramaestre, fueron convenientemente almacenadas, al igual que el tabaco, y se acelera la entrega de 460 toneladas de carbón para ponerlas a disposición de las necesidades locales.
El aseguramiento de la cobertura de pienso para las ramas avículas y porcina es otra de las acciones que realiza la agricultura a pocas horas del anuncio del paso del huracán Elsa por la zona suroriental de Cuba.
A nivel del sistema de puerto-transporte-economía interna, se da prioridad a la descarga de tres buques surtos en el puerto Guillermón Moncada, de Santiago de Cuba, en tanto en las radas de las provincias de Granma y Guantánamo no hay operaciones de barcos en estos momentos, según acotó a este rotativo José Antonio Olivares Díaz, director de la Empresa de Servicios Portuarios del Oriente.
En el caso del Comercio se prioriza la venta de la canasta básica a la población en las bodegas ubicadas tanto en zonas citadinas como rurales, en tanto el sistema de la Salud Pública, que enfrenta además un feroz rebrote de la COVID-19, puntualiza hasta el más mínimo detalle en aras de reducir el impacto que puede desencadenar la conjunción de la pandemia y el paso del huracán.
Ya fueron evaluados y se avanza en aspectos relacionados con el aseguramiento de los insumos necesarios para la atención médica en hospitales y centros de aislamiento, la conformación y traslado de bigardas quirúrgicas hacia zonas que habitualmente quedan incomunicadas por intensas lluvias, como el municipio de Guamá, así como la disponibilidad de combustible para los grupos electrógenos de emergencia y el transporte sanitario.
Particular interés se pone en todo cuanto tiene que ver con el Programa Materno Infantil, de ahí que ya se trasladan a sitios cercanos a los hospitales maternos a las gestante que están a término de su período de embarazo y residen en zonas alejadas de dichas instituciones.
Desobstrucción de desagües, poda de árboles, limpieza de azoteas y drenes, empapelado de cristales, entre otras cuestiones básicas ya conocidas por las administraciones y la población se concretan en la provincia de Santiago de Cuba que ante la amenaza del huracán Elsa se informa y acciona.