Colectivos de trabajadores de la capital del país, en estrecha alianza con organizaciones e instituciones del territorio, despliegan su mayor esfuerzo en poner a punto los más de 2 mil lugares de la provincia que sirven ─y servirán─ como vacunatorios y observatorios durante la extensión de la intervención sanitaria con el candidato vacunal Abdala a toda la población habanera, a partir de la segunda quincena del actual mes.
Según se conoció fue seleccionado un amplio grupo de centros laborales, que junto a consultorios del Médico de la Familia, escuelas y varios lugares, servirán para la generalización del candidato, y en ellos sus propios trabajadores, y otros, ejecutan acciones constructivas, de carpintería, en redes hidráulicas, colocación de luminarias y distantes labores, entre las que se incluyen las vinculadas a la telefonía.
Además de esas tareas, un número significativo de centros de muy diversos sectores han facilitado equipos de refrigeración, de cómputo y transporte, etcétera informaron Angelina Calderón García y María Caridad Herrera Pérez, del Secretariado Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba en La Habana, quienes destacaron que entre los que apoyan la extensión de la intervención sanitaria se cuentan trabajadores del sector no estatal.
Ello servirá para garantizar que al concluir junio, la totalidad de la población prevista a vacunar tenga aplicada al menos una dosis de Abdala, y más del 50 % la segunda. Al terminar julio habrá concluido el esquema de las tres dosis a esa población, indicó José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública.
Magníficas condiciones en Disaic
Difícilmente el colectivo de la Casa Consultora Disaic, perteneciente al Grupo Empresarial Sidero Mecánico del Ministerio de Industrias, no se incluya en la vanguardia de la lista de centros que apoyan la extensión sanitaria con el candidato vacunal Abdala en la capital cubana a partir de esta segunda quincena de junio.
Disaic, enclavado en la avenida Buenos Aires, en el municipio del Cerro, ofrece su instalación para que dos consultorios del Médico de la Familia en el territorio desarrollen allí su vacunación. Brinda asimismo dos de sus aulas, con magníficas condiciones para que sirvan como observatorio para los ya intervenidos con el candidato vacunal.
Un breve recorrido por Disaic permite, con rapidez, comprobar que ha sido una tarea asumida con gran responsabilidad por todos, en especial de la sección sindical y la dirección, de ahí la favorable certificación hecha del lugar por las autoridades encargadas del Ministerio de Salud Pública y otras instituciones encargadas.
El grupo de trabajadores que pone a punto las áreas que estarán vinculadas a la vacunación así lo atestigua, incluidos los jóvenes trabajadores sociales que al momento de nuestra visita consultaban los listados.
Isabel García, directora general de la Casa Consultora, informó sobre las diversas acciones ya emprendidas: “En nuestro comedor es donde se tomará la presión arterial a quienes se vacunarán y se comprobarán otros datos imprescindibles. En el lugar, con dos refrigeradores dispuestos, solo nos resta la pintura ―debió realizarse el domingo último―, pues ya higienizamos las dos aulas que servirán como observatorios.
“Además, subrayó, para facilitar los registros de la vacunación pusimos dos informáticos con sus respectivos equipos de cómputo. También facilitamos una computadora al policlínico Girón, que atiende toda el área. Por demás, hicimos las coordinaciones para que trabajadores nuestros aún no vacunados puedan hacerlo por aquí”.
A simple vista puede verse las buenas condiciones materiales existentes en Disaic, su buen ambiente laboral. Pero sin duda, su colectivo hizo suya su directa colaboración en la intervención vacunal en la capital del país. “Incluso, acordamos que cada día estén permanentemente de guardia y en función de la vacunación un miembro del consejo de dirección y otro de la sección sindical”.
Esta acción es un ejemplo de la incorporación de prácticas sostenibles,éticas y responsables en nuestra empresa y la gestión de sus impactos no sólo económicos, sino también sociales y ecológicos en las relaciones que mantenemos con el Consejo Popular y la comunidad donde está enclavada Disaic. Apoyo total del colectivo de trabajadores a la campaña de vacunación en nuestro territorio! Vamos por mas!