Carlos González Torres, jubilado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias en el 2008, empezó a laborar en el 2016 en Planificación Física municipal de Las Tunas como jefe de Catastro, a solicitud del director.
“No sé si me preocupa, me asombra o me indigna que se tome una decisión tan arbitraria. Hace solo días que lo determinó sin ni siquiera reunir al consejo de dirección para colegiar la medida.
“Separó del cargo al jefe de Inversiones, con una evaluación excelente, confeccionada y firmada por él mismo. A pesar de que ese departamento tenía una buena valoración sobre el trabajo realizado le dio un día para que el compañero entregara el cargo.
“Según el director provincial, al nuevo director se le comunicó que se apoyara en estos dos departamentos por su buenos resultados y lo que hace es desarticular lo logrado. Sin embargo, tiene tres departamentos con serios problemas por incumplimiento y no ha separado a nadie.
“Nos preguntamos cuál es el inadecuado método de estilo y dirección de prescindir del personal que le tiene por lo menos dos departamentos con buenos resultados a nivel nacional y sin quejas de la población.
“Quisiéramos conocer una respuesta legal sobre si este proceder es válido, como si la empresa fuera particular. Decidir que no deseo más tus servicios y chao.
“Quedamos entre los jubilados un compañero que viene del Minint y yo, quienes seremos las próximas víctimas”.